_
_
_
_
_

Christopher propondrá a Siria e Israel un acuerdo de seguridad en el Golán

Expresiones optimistas dieron ayer a la gira número 13 del secretario de Estado norteamericano, Warren Christopher, un encuadre familiar, pero israelíes y sirios parecen más conscientes que nunca de los obstáculos que bloquean un avance a corto plazo. Christopher llegó a Jerusalén con propuestas que, según una versión periodística israelí, incluyen una supuesta oferta estadounidense para la instalación de sistemas de vigilancia en ambos lados de la frontera sirio-israelí tras la eventual retirada de tropas israelíes del Golán.

Poco antes de llegar a Jerusalén, Christopher dijo que las partes involucradas en el conflicto están "con ánimo de resolver problemas". En declaraciones formuladas durante una escala técnica en Shannon (Irlanda), advirtió que la proximidad de las elecciones en EE UU e Israel hace aún más imperioso un arreglo.Aunque la gira de Christopher ha despertado nuevas expectativas en tomo a los posibles "acuerdos de seguridad" en el Golán -es decir, los temas que deberán analizar los generales israelíes y sirios cuando reanuden negociaciones en Washington este mes-, en Israel ha brotado vigorosamente preocupación por las consecuencias que un apresurado acuerdo puede acarrear para el futuro aprovisionamiento de agua. La meseta del Golán, capturada en la guerra de 1967 y anexionada por Israel en 1981, incluye la cabecera del río Jordán y otras fuentes del mar de Galilea. Cerca de un tercio del agua que usa Israel proviene de los altos del Golán, y aunque las garantías de futuro aprovisionamiento son parte de las negociaciones de paz, éstas se han concentrado casi exclusivamente en el aspecto estratégico y militar.

Ese eclipse ha sido detectado con alarma y resumido con elocuencia por el prestigioso comentarista Zeev Schiff, para quien la cuestión del agua en las negociaciones con los sirios es mucho más importante "que la fecha de la apertura de una Embajada israelí en Damasco".

El primer ministro israelí, Isaac Rabin, puso énfasis en los beneficios acuáticos de la cooperación con los jordanos cuando, junto con el rey Hussein y el canciller alemán Helmut Kohl, lanzaron en la región limítrofe de Baqura un proyecto financiado por la Unión Europea y que permitirá la utilización conjunta del río Yarmuk y el mar de Galilea. "Si el agua es vida, demos vida a los pueblos que hacen la paz", dijo Rabin.

Pero, en un amplio artículo publicado por el diario Haaretz Schiff apunta que, mientras el Ejército israelí prepara documentos para la negociación con los sirios, se está poniendo muy poca atención a la vital cuestión de los recursos hidráulicos.

"Los militares mencionan el tema del agua en tercera o cuarta prioridad, algunas veces por mera coincidencia y en el contexto fronterizo, no como una cuestión válida por sí misma. Pero se trata de una cuestión de suprema importancia estratégica", afirma. Schiff advierte que si la cuestión del agua no es resuelta adecuadamente se convertirá en pretexto para futuras disputas y guerras.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Rabin, añade Schiff, "debe tener en cuenta que un fracaso en las negociación sobre el agua significará una derrota en un referéndum sobre el futuro del Golán".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_