La UE generará tres millones de empleos en 1995 y 1996 con un crecimiento del 3%
La expansión económica actual es "sana y sostenida", y se prolongará durante este año y el próximo a un ritmo del 3% anual, según las previsiones de primavera de la Comisión Europea, publicadas ayer. Ésta es la baza fundamental que permitirá lacreación de tres millones de empleos en la Unión Europea (UE) durante 1995 y 1996, aunque la tasa de paro seguirá siendo excesiva. Pese a que España figurará en el grupo de cabeza de la creación de puestos de trabajo, seguirá siendo el farolillo rojo del desempleo.
El crecimiento económico de 1994 (2,7%), que se prolongará a ritmo muy parecido en 1995 (3,1%) y 1996 (2,9%) es "sano y sostenido", según calculan los técnicos de la Comisión en sus previsiones primaverales y explicó ayer el comisario de Economía, Yves-Thibault de Silguy. Esta previsión optimista se cimenta no sólo en las cifras, sino también en los índices de con fianza empresarial. Sólo le amenazan las tormentas monetarias, el aumento de las diferencias de los tipos de interés con Alemania -aunque los tipos a largo convergen-, y "los aumentos salariales en algunos países" según Silguy, un hombre de fidelidad balladurista y que ayer parecía criticar en sordina al gaullismo social del nuevo presidente francés, Jacques Chirac.
Pero las previsiones realizadas ya incluyen estas "amenazas" y por eso apenas se han variado so bre las últimas. El crecimiento sostenido será la principal palanca de la creación de puestos de trabajo, a un ritmo del 1% anual, "lo que corresponde a una creación neta de tres millones de empleos" una velocidad superior a la de los primeros años ochenta e incluso a la de la mitad de los setenta.
Pero en estos dos años entrarán en el mercado de trabajo 1,4 millones de jóvenes, por lo que el paro -que hoy afecta a 16,5 millones de europeos- sólo se verá disminuido en 1,6 millones. Así, la tasa de desempleo descenderá del actual 10,8% hasta un 9,5%. "Ello confirma que sólo con el crecimiento no eliminaremos el excesivo nivel de paro estructural", que supone más de dos tercios del total, según Silguy, por lo que se re quieren políticas activas de empleo.
España figurará entre los países más creadores de empleo (junto con Finlandia, Dinamarca, Irlanda, Reino Unido y Suecia), (1,5% en 1995, contra una media del 1%; 2% en 1996, contra un promedio del 1,1%). Pero será insuficiente: seguirá a la cabeza del desempleo, con un 22,8% al final de 1996, menos que el 24,1% actual y sólo igual al de 1993. Y más del doble de la media.
Los otros datos macroeconómicos evolucionan favorablemente, pero menos de lo deseado, por lo que la Comisión sigue urgiendo, sobre todo a los países en situación más débil -como España- aplicar sus planes de convergencia y, genéricamente, a realizar ajustes adicionales para estar en condiciones de sumarse a la moneda única en la primera de las fechas previstas, 1997.
Primera cita de la UEM
Silguy insistió en la tesis de la Comisión -que ya casi nadie comparte, como se comprobó en el Consejo de Economía y Finanzas de Versalles-, según la cual "no debe excluirse" la unión monetaria en esa primera cita.
Argumentó para ello con las previsiones últimas. En inflación, ocho países superan el 3%1tres se mueven en torno a esa cifra, y cuatro están por debajo, por lo que se necesita un esfuerzo suplementario. En déficit público, tres respetarán el criterio del 3% de déficit sobre el PIB (Alemania, Irlanda, Luxemburgo), cuatro pueden llegar fácilmente (Reino Unido, Dinamarca, Holanda) y otros tres, con esfuerzos adicionales (Bélgica, Francia y Austria). En deuda (el techo es del 60% sobre el PIB), cumplirán Francia, Alemania, Luxemburgo, Reino Unido e Irlanda, y podrían llegar, con esfuerzos, Bélgica, Dinamarca, Holanda, Austria y Finlandia.
Todo ello según la apreciación del comisario francés, que no mencionó las posibilidades de España sobre ningún parámetro, seguramente con razón, a juzgar por las cifras. Pero sí las de Francia, en todos y cada uno de los renglones, como cumplidora o como aspirante a cumplir, probablemente con alguna dosis de voluntarismo patriótico. Algo de lo que carecía su antecesor, el muy sólido danés Henning Christophersen.
Por su parte, el ministro de Economía español, Pedro Solbes, confirmó ayer en el Congreso "que la economía española está creciendo por encima del 2,8% que es la previsión del Gobierno". Respecto del informe de la Comisión Europea, el ministro señaló su acuerdo con la práctica totalidad de los datos recogidos, aunque mostró su preocupación por la diferencia en cuanto al objetivo de inflación.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.