Los monos de Filipinas

El virus Ebola es conocido sobre todo por el libro Zona caliente, la crónica novelada, convertida en superventas, de un hecho real. Este virus infectó en 1989 a un centenar de monos procedentes de Filipinas que pasaban la cuarentena en las instalaciones en Virginia de una empresa dedicada a importar estos animales desde éste y otros países, algunos africanos, con destino a los laboratorios científicos.El accidente requirió la entrada de personal especializado del ejército, equipado con trajes especiales de aislamiento para trabajar con organismos que necesitan un máximo nivel de seguridad. El equipo de especialistas mató a los 450 monos supervivientes, de los 500 que estaban en el edificio,con inyecciones letales, una operación difícil dado su estado, y luego les realizó la autopsia para verificar la causa de la enfermedad.

Posteriormente se esterilizaron las instalaciones, que ahora permanecen vacías tras haber sido vendidas a un banco.

Dos empleados de la casa de los monos enfermaron pero sobrevivieron, lo que hace suponer que esta variante del virus es más dañina para los monos extranjeros que para los humanos. La operación se llevó a cabo en secreto absoluto, dada la cercanía de las instalaciones a la capital, Washington. El autor del libro, Robert Preston, especializado en temas científicos, escribió primero un artículo sobre el tema en The New Yorker que hizo popular el asunto.