Las obras de la plaza de Oriente se topan con restos de la muralla cristiana

El consejero de Cultura de la Comunidad de Madrid, Jaime Lissavetzky, sorprendió ayer, en el Pleno del Parlamento regional, con una revelación inesperada: las obras que ejecuta el Ayuntamiento de Madrid en la plaza de Oriente han tropezado con importantes restos de una antigua muralla de la ciudad. Lissavetzky explicó a los diputados que el lienzo hallado, de 14 metros de altura y cinco de longitud, pertenece "a la muralla árabe de Madrid". Pero el consejero patinó unos siglos: en realidad, se trata de un trozo de la defensa cristiana que tuvo Madrid (siglo XI).

El consejero, a preguntas de Javier Doz, diputado de IU, sobre las obras de la plaza de Oriente, respondió: "Parece ser que se ha encontrado un muro de 14 metros de altura en las excavaciones que se están haciendo ahora mismo en la calle de Bailén. Y ese muro parece ser que tiene que ver con la antigua Casa del Tesoro y con lo que pueden ser los restos de la muralla árabe. Si eso se llega a ver claramente y se certifica que es así, ahí no se podrían hacer estas obras". El consejero añadió que arqueólogos de la Comunidad y del Ayuntamiento estudian actualmente el descubrimiento. Lissavetzky zanjó la cuestión diciendo: "No permitiremos que se haga ningún tipo de obra que atente contra el patrimonio".Cristóbal Vallhonrat, subdirector general del Patrimonio, confirmó ayer que "los arqueólogos encontraron hace unos días un lienzo de unos 10 o 15 metros de altura y 5 de longitud". Vallhonrat añade que este trozo de muralla ha sido descubierto adosado a las paredes de la antigua Casa del Tesoro, edificio de la época de los Austrias. "Todo parece indicar que nos encontramos ante la muralla cristiana de Madrid. Si se confirmase

[aún falta el dictamen de la Universidad. Complutense o de los expertos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas] estaríamos ante un hallazgo importante porque se podría trazar con mayor exactitud su perímetro y su cierre por el norte". La Comunidad prohibirá, desde hoy, cualquier tipo de demolición de la estructura.

"Se debe de tratar de un trozo de la primera muralla cristiana de Madrid", cuenta Ángel Fuentes, catedrático de Arqueología de la Universidad

Autónoma. La capital fue conquistada a los árabes por las tropas cristianas del rey Alfonso VI en 1085, y pocos años después se empezó a rodear la ciudad con un perímetro amurallado. "También se puede asegurar sin mucho riesgo que el trozo encontrado está entero, ya que no creo que la muralla tuviera más de 15 metros".

Luis Armada, director de obras del Ayuntamiento, desmiente tajantemente las palabras del consejero: "Eso es completamente falso. ¡Cómo va a aparecer una muralla de 14 metros si sólo hemos excavado 11 metros de profundidad! No hemos encontrado, al día de hoy, ni un ladrillo de la muralla árabe. Hemos hallado pequeños trozos de cerámica, bases de muros de contención sin valor y objetos de diferentes siglos. Todos se pueden ver en una exposición que hemos levantado en la misma plaza". Armada continúa: "Lissavetzky ha sido mal informado. Una muralla de 14 metros no aparece de un día para otro. No entiendo lo que quiere decir".

"No he oído nada", comentaba ayer, al tiempo que vetaba el paso a los periodistas uno de los encargados en la plaza de Oriente. "Que si es la casa de Velázquez, que si es la del Tesoro..., pero de una muralla árabe, nada". A pocos metros, en el extremo norte de las excavaciones, una calzada de piedras limitaba con una muralla y un gran agujero. Uno de los trabajadores señaló vagamente esos restos como los buscados.