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Los balseros cubanos desestabilizan el Caribe

El problema de los balseros cubanos amenaza con convertirse en uno de los grandes dolores de cabeza del Caribe. Decenas de personas siguen saliendo de la Isla en pequeñas balsas y botes hacia Estados Unidos, pese a que Washington no los aceptará en su territorio y los recluirá en Guantánamo, mientras que 30 balseros han llegado a Costa Rica este mes procedentes de Gran Caimán, donde permanecen varados cerca de 1.400 refugiados cubanos desde la crisis del ano pasado.La guardia costera de EE UU ya ha recogido a 154 balseros este año en aguas M estrecho, mientras que otros han llegado a diferentes cayos de la Florida en extrañas circunstancias.

En Guantánamo, Santiago de Cuba y otras ciudades del oriente de la isla, decenas de personas siguen intentando cruzar a la base naval norteamericana de Guantánamo, bien por mar, bien atravesando los campos minados que existen en la frontera. En la actualidad, 30.000 balseros permanecen en los campamentos de refugiados de la base naval, y autoridades militares de EE UU ya han advertido que, debido a la falta de perspectivas y de solución a su situación, podrían producirse disturbios en los meses de verano, cuándo el termómetro alcanza los 40 grados centígrados en Guantánamo.

Mientras tanto, la llegada a territorio costarricense de dos grupos de 15 balseros a finales de este mes desde Gran Caimán se ha convertido en un problema de difícil solución para el Gobierno de José María Figueres, quien se debate entre darles asilo político o deportarlos. El pasado día 20, barcos costarricenses rescataron a otro grupo de 15 frente a las costas de la ciudad caribeña de Puerto Limón, suceso que se repitió el día 28 de marzo con otro también de 15. Según las autoridades costarricenses, los balseros tenían cartas de navegacion y víveres en cantidades tales que hacen pensar que la llegada fue accidental. Figueres expresó su preocupación por esta situación, que podría derivar, en caso de que se les conceda asilo político, en una avalancha de refugiados desde los campamentos de Gran Caimán.

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