Belloch reorganiza los servicios policiales, pero deja en el aire los de Información

El titular de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, ha reorganizado todas las unidades del Cuerpo Nacional de Policía, desarrollando por fin el esquema diseñado en junio del año pasado, tras hacerse cargo del superministerio. Pero la comisaría general de Información -un área que Belloch pretende que sea un servicio de inteligencia dedicado a la captación de datos de interés para la seguridad del Estado- sigue sin estar perfilada. En la orden publicada el pasado día 6 en el BOE se dice escuetamente que esta comisaria "estará integrada por las unidades y servicios que se determinen".La remodelación confirma que parte de las competencias que hasta ahora tenía la comisaría general de Información, a cuyo frente está Gabriel Fuentes, pasan a ser desempeñadas por unidades encuadradas en la comisaría general de Policía Judicial que dirige Enrique de Federico.

Hasta la llegada de Belloch a Justicia e Interior, todos los asuntos relativos a la lucha contra el terrorismo eran competencia exclusiva de la comisaría general de Información. Ahora, sin embargo, la actuación directa contra los grupos terroristas correrá a cargo de dos brigadas de la Unidad Central Operativa Antiterrorista, encuadrada en Policía Judicial.

Unidades autiterroristas

En Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao y Pamplona se está ultimando estos días la creación de las Unidades Territoriales Antiterroristas (UTA), cuya misión son "las tareas operativas en la persecución de actividades terroristas". Estas unidades estarán encuadradas en las respectivas brigadas provinciales de Policía Judicial, por lo que dejarán de pertenecer a las respectivas brigadas de Información. Es decir, que la localización y detención de los comandos será una tarea más de los agentes de Policía Judicial, que hasta ahora se limitaban a la captura de delincuentes comunes.

A las unidades dependientes de la comisaría general de Información se les asigna la tarea de captar y analizar cualquier dato de interés para la seguridad del Estado (sobre todo los referentes a terrorismo, narcotráfico y delincuencia organizada). Pero la explotación práctica de esos datos la realizarán los agentes de Policía Judicial. Éstos serán también los que se encarguen de las investigaciones de los atentados.