Leve recuperación del dólar y la peseta
Tregua en los mercados por las declaraciones de apoyo de EE UU y Alemania al dólar y las divisas europeas
Los mercados se dieron ayer una tregua después de que las autoridades monetarias de Estados Unidos y Alemania rompieran el silencio de los últimos días para hacer declaraciones en defensa del dólar y otras divisas europeas. Las fuertes subidas de tipos de interés a corto plazo que efectuaron los bancos centrales de Francia, Dinamarca y Bélgica también actuaron de revulsivo contra la especulación, que ha sumido al Sistema Monetario Europeo (SME) en la peor crisis de los últimos 19 meses. El Banco de España, que ya subió el lunes los tipos a un día, optó por intervenir comprando pesetas, según observaron varios operadores.El dólar, que en Tokio había tocado nuevos mínimos históricos frente al yen (88,75) y el marco (1,3455), frenó su caída libre por la mañana en Europa. El mercado prefirió no seguir tentando nuevo mínimos en espera de la intervención del presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, ante el Congreso estadounidense. Sólo en los últimos cinco días, el dólar se ha depreciado un 7% frente al marco y un 6% frente al yen, arrastrando consigo a mínimos históricos a las monedas europeas con problemas políticos o presupuestarios. Greenspan, que expresó su preocupación por el efecto inflacionista que puede tener un dólar tan bajo, ayudó a consolidar la recuperación de la moneda estadounidense. "El mercado ha oído lo que quería oír", señala Manía Fernández de Córdoba, de Analistas Financieros Internacionales.
Subidas de tipos
La subida del dólar sirvió para afianzar la recuperación de las monedas europeas. Por la mañana recibieron la ayuda de sus bancos centrales, en forma de subidas de tipos o, directamente, de intervenciones.
La moneda española, que había superado las 95 pesetas por arco en Tokio, cotizó por encima de las 94 a la apertura en Marid. La ayuda de la máxima autoridad monetaria española logró estabilizarla al cierre en tomo a las 2 pesetas frente a las más de 93 de a víspera. España, no obstante, o se recuperó tanto como el resto. "La recuperación del dólar ayuda más a las monedas cuyos países tienen fundamentos más saneados y España queda fuera", pina Nicolás Hernández, de AB Asesores, quien asegura que la recuperaclón económica española stá más en peligro que otras europeas afectadas por la inestabilidad monetaria.
El Banco de Francia fue el que actuó más agresivamente. Suspendió una subasta de depósitos a cinco y 10 días, al 6,45%, y concedió préstamos a un día a un tipo el 8% para encarecer la especulación contra su moneda. La media tuvo un efecto inmediato en la divisa francesa: de cotizar a 3,59 se estabilizó en los 3,55 francos por marco. Su ministro de Economía, Edmond Alphandéry, recogió la llamada que repetidamente ha lanzado Japón para celebrar una reunión de los países más ricos (G-7) que frene la inestabilidad.
Francia, además, contó ayer con el decidido apoyo de Alemania. Primero, un comunicado del Bundesbank, en el que el banco central alemán aseguraba que la presión especulativa sobre las monedas europeas era exagerada, aunque reconocía que en el casa, de algunos países con desequilibrios presupuestarios el castigo podía estar merecido. Francia, a diferencia de España o Italia, tiene un déficit público inferior al 3% del PIB que exige Maastricht.
Si bien el comunicado no daba pistas sobre la dirección de los tipos de interés en Alemania, que mantiene a la expectativa al mercado, un miembro de su consejo declaró, independientemente y en contra de lo que ha sostenido hasta ahora el presidente del banco emisor, Hans Tietmeyer, que no había que descartar en el corto plazo una nueva bajada de tipos. Esta medida frenaría la imparable subida del marco frente al dólar y el resto de las europeas. El canciller Helmut Kohl también puso su granito de arena al decir que los ataques al franco están injustificados y que la lira se recuperará una vez pase la inestabilidad política en Italia. Hoy el Bundesbank se reúne para estudiar esa posible bajada del precio del dinero.
No sólo Francia subió sus tipos. Dinamarca y Bélgica, que hasta ahora han cotizado al resguardo de la fortaleza del marco, también subieron sus tasas centrales un punto, hasta el 6% y el 5,85%, respectivamente. Sus divisas comienzan a mostrar cierta vulnerabilidad a la crisis monetaria.
A la espera del Bundesbank
Las autoridades monetarias parecieron reaccionar por fin a la crisis monetaria. Hasta ayer Japón era el único que había estado haciendo llamamientos a sus socios más ricos para coordinar una acción en apoyo del dólar que devolviera la calma a los mercados. El Banco de Japón descartó bajar más los tipos de interés están en el 1,75% para frenar la subida del yen.
Pero para muchos analistas la tranquilidad de ayer es temporal si no viene seguida de acciones concretas como, en el caso de Estados Unidos, una subida de tipos de interés que devuelva algo de atractivo al dólar, o en el caso de Alemania, una bajada de los intereses.
En el caso de Estados Unidos, a pesar de la preocupación por la inflación expresada por Greenspan, la subida de tipos es difícil, opinan varios analistas consultados. De un lado, ésta aceleraría la salida de capital de México hacia EE UU agravando la crisis de su país vecino. De otro, podría frenar en exceso el crecimiento económico que ya da síntomas de enfriamiento.
Una medida de sentido contrario en Alemania tampoco parece posible, opina Henrik Lumholdt, analista jefe de Bank of America después del acuerdo salarial alcanzado con el principal sindicato del país IG Metall el lunes pasado. Este prevé una subida del 4% mientras que el Bundesbank quiere limitar la inflación al 2%. Una bajada de tipos presionaría aún más los precios al alza.
Otra posibilidad sería que finalmente el Grupo de los Siete se reuniera para decidir medidas contra la caída del dólar.. Un precedente, en 1987, fue el Acuerdo del Louvre del G-7 para defender al dólar. Pero sus intervenciones coordinadas sólo consiguieron detener la caída de la moneda estadounidense temporalmente.
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