La Generalitat quiere sustituir los empleos temporales por nuevos contratos fijos con despido innegociable

La propuesta de la Generalitat de introducir el llamado contrato estable -con indemnización fija e innegociable por despido- permitirá reducir el número de contratos temporales existentes, según el consejero de Trabajo, Ignasi Farreres. Farreres sugiere que la creación de este nuevo contrato debería hacerse de forma pactada con los sindicatos y garantizar que las empresas no puedan sustituir trabajadores fijos por estables.

La propuesta de Ignasi Farreres consiste en crear un nuevo contrato de trabajo, estable y al mismo tiempo flexible, que se aplicaría sólo a las nuevas contrataciones, respetando los derechos adquiridos de los trabajadores que actualmente ya disponen de un contrato indefinido". El objetivo último es fomentar la contratación indefinida y reducir la temporal, que actualmente supone ya el 35% de todos los contratos existentes.En síntesis, Farreres propone que sean los empresarios quienes decidan si se dan o no causas objetivas para reducir la plantilla, sin tener que pasar el actual trámite administrativo. Los trabajadores despedidos recibirían una indemnización innegociable de 20 días por año trabajado. Para ejecutar el despido, bastaría con un preaviso y el pago de la indemnización en los despidos de menos de 10 trabajadores y la comunicación de la decisión a la autoridad laboral y a los representantes de los trabajadores para los despidos colectivos. Las causas objetivas de despido se fijarían de acuerdo con las directivas del Consejo Europeo sobre despidos colectivos.

El cambio respecto a la normativa actual es sustancial porque ahora son los empresarios quienes deben demostrar que existen causas objetivas de despido -caída de las ventas, renovación tecnológica, etcétera- mientras que con la nueva fórmula son los trabajadores quienes, a posteriori han de aportar pruebas al juez de que el despido no era por causas objetivas y por lo tanto improcedente. En ese caso, el juez puede aumentar la indemnización.

Según Farreres, esta fórmula no significa un abaratamiento del despido porque este ya es en la actualidad de 20 días por año trabajado cuando se dan causas objetivas de despido. El problema es que ahora las regulaciones de empleo van precedidas de un proceso administrativo; para evitarlo, muchos empresarios acaban pactando indemnizaciones mayores. Todo ello ha creado un clima empresarial radicalmente contrario al empleo fijo "porque nunca se sabe lo que costará una reducción de empleo si es necesaria".Modelo italiano

Farreres admite que la introducción de este contrato "debe ir acompañada de controles para evitar que las empresas sustituyan a los trabajadores actualmente fijos por nuevos contratados estables" y sugiere la posibilidad de aplicar el sistema italiano de la Cassa integrazioni, que obliga a las empresas a readmitir a los trabajadores despedidos cuando quieren volver a ampliar la plantilla al mejorar sus perspectivas.

Farreres propone eliminar al mismo tiempo los contratos temporales "no causales", es decir aquellos que no obedecen a una causa determinada que justifique una contratación temporal. Pero en la actualidad casi todos los contratos temporales ya son causales y tienen como objetivo atender casos específicos como el lanzamiento de nuevos productos, bajas temporales por maternidad, excedencias, servicio militar, etcétera.

Desde la aplicación de la reforma laboral han aumentado considerablemente los llamados contratos por obra y los contratos a tiempo parcial. Aparentemente ninguno de ellos se vería afectado por la aplicación de los contratos estables, aunque según Farreres la tendencia de las empresas sería contratar trabajadores fijos porque les saldría más a cuenta que sustituir a unos trabajadores eventuales por otros.

La Generalitat no quiere imponer este contrato por vía parlamentaria, sino "provocar un gran debate para acabar con el paro y el empleo precario. Si alguien tiene una propuesta mejor, que la presente y que se debata".