Grecia da marcha atrás en su 'sí' a la unión aduanera de Turquía con la UE
El Gobierno griego rechazó ayer el acuerdo inicial para desarrollar la unión aduanera entre Turquía y la Unión Europea (UE) que se alcanzó el lunes en una reunión del Consejo de Ministros comunitarios en Bruselas. El primer ministro griego, Andreas Papandreu, informará por escrito a sus 14 colegas de la UE para exponerles las condiciones que exige antes de desbloquear el acuerdo con Turquía.El ministro de información, Evangelos Venizelos, anunció al final de una reunión gubernamental que todavía "existe un margen para mejorar algunos puntos [del acuerdo] que no convienen a la parte griega". Grecia no levantará su veto si no consigue que se fije una fecha para el comienzo de las negociaciones para el ingreso de Chipre y de Malta en la UE.
El Ejecutivo de Papandreu no se conformó con el compromiso indefinido de los Quince de que dichas negociaciones "podrían comenzar" después de la Conferencia Intergubernamental de 1996. Además, Grecia solicita que se elaboren medidas para proteger su sector textil de la competencia turca.Ola de críticas
El recientemente nombrado vi ceministro de Exteriores griego, Georgos Mangakis, se ha en frentado a una ola de críticas de sus predecesores en la cartera y del resto de las fuer ' zas políticas griegas, que consideran que el acuerdo de Bruselas no satisface los intereses griegos.
Venizelos se apresuró a declarar que Mangakis "hizo todo lo que estuvo a su alcance, teniendo en cuenta el clima negativo que existía", pero puntualizó que dicho acuerdo no era definitivo y aún tenía que ser estudiado por el Gobierno.
Atenas insiste en una pronta admisión de Chipre en la UE como una fórmula para que se solucione el problema político de la división de dicha isla, cuya parte norte se encuentra ocupada desde hace 20 años por tropas turcas y donde, en 1983, se fundó un Estado turcochipriota que no ha sido reconocido por la ONU.
Atenas condiciona a la "liberación" de Chipre y al respeto de los derechos humanos en Turquía el levantamiento del veto que ejerce en los últimos 10 años sobre la ayuda. financiera comunitaria a Turquía.
Los restantes Estados miembros de la UE indicaron ayer en Bruselas que no piensan realizar esfuerzos adicionales que modifiquen sustancialmente el pacto alcanzado sobre las cuestiones turca y chipriota, informa Xavier Vidal-Folch. Los 14 socios de Grecia consideran que sus demandas económicas asociadas a esta negociación resultan exorbitantes. Fuentes del Consejo indicaron que la crisis abierta es importante -el acuerdo del lunes fue arduo de obtener-, que el asunto "ha quedado bloqueado" y que difícilmente podrá solucionarse en un simple nivel de embajadores de los Quince.
