Las 'casas provisionales' cuestan lo que un piso 'definitivo'

Casas bajas "provisionales" y prefabricadas que cuestan más de cinco millones de pesetas. Ése es el precio de obra de cada una de las 100 viviendas que el Ayuntamiento de Madrid construye en la Cañada Real como alojamiento "temporal" -según insiste el consistorio- para 70 familias chabolistas de Los Focos y 22 de la Cañada.Un piso de protección oficial, integrado en la ciudad y concebido para durar décadas, tiene un precio de obra de 5 millones a 10 millones si se construye en suelo público.

La nueva barriada de la Cañada, objeto de protestas ciudadanas y de un fuego cruzado entre los responsables de urbanismo del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid, fue adjudicada hace un año por 540 millones de pesetas a la empresa Dragados y Construcciones.

Este dinero incluye el ensamblaje de estas casas construidas en planchas prefabricadas recubiertas de hormigón y la urbanización de los terrenos, es decir, el allanamiento y preparación de los suelos y las acometidas de agua, luz y electricidad.

Es precisamente la urbanización del suelo lo que más encarece este tipo de obras. Cuando se construyen bloques, el coste de los gastos de urbanización se distribuye entre más viviendas y, por tanto, incrementa menos el precio de cada una. Además, realizar las acometidas de servicios en terrenos como la Cañada, lejos de toda zona habitada, resulta más caro.

En Madrid existen cuatro poblados de realojamiento similares al que ahora propone el Ayuntamiento: la Quinta (Fuencarral), 83 familias; Plata y Castañar (Villaverde), 80 familias; La Rosilla (Vallecas Villa), 88 familias, y La Celsa (Puente de Vallecas), 96 casas en construcción.

El gerente del Consorcio para el realojamiento de la población marginada, Julio Fernández Mato, asegura que sus habitantes pagan alquileres en torno a las 15.000 pesetas al mes. "Tenemos un nivel de morosidad inferior al 23% del Instituto de la Vivienda de Madrid", afirma.

Sin embargo, el director general de la EMV, Luis Armada, señala que los inquilinos de la Cañada Real pagarán un máximo de 3.000. pesetas, en función de sus ingresos.

Además de estas barriadas de casas prefabricadas de hormigón, existen otras cinco aún más precarias, formasdas por barracones o por casetones envejecidos: San Fermín (Villaverde), 74 familias; avenida de Guadalajara (San Blas), 217 familias; Cerro de, las Liebres (Fuencarral), 76 familias; Cañaveral (Vicálvaro) y Jauja (Latina), 82 familias. Todas ellas se construyeron con carácter provisional, pero el de la avenida de Guadalajara mantiene esa "temporalidad" desde 1981.