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La retirada de los 'cascos azules' de Bosnia exige enviar 25.000 soldados y un plazo de diez semanas

Xavier Vidal-Folch

La evacuación de los cascos azules de Bosnia requeriría el envío de cerca de 25.000 soldados y sólo se podría realizar en un plazo de diez semanas. Éstos son los datos fundamentales del plan elaborado por los mandos militares de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) para la eventualidad de que Estados Unidos levante el embargo de armas a Bosnia, lo que supondría la inmediata evacuación de las faerzas de las Naciones Unidas en misión humanitaria. El plan tiene mil páginas y está todavía sujeto a enmiendas de los 16 Gobiernos de la OTAN.

El plan se basa en la concentración de los 25.000 soldados; que protegerían la evacuación de los cascos azules (actualmenteson 22.000 en Bosnia y 15.000 en Croacia) en territorio croata e italiano, desde donde se dirigirían a Bosnia para rescatar a los soldados de la ONU.,Pero tiene una variante. Croacia ha anunciado que no renovará el permiso para la estancia de los cascos azules en su territorio cuando el actual caduque, el 31 de marzo, al considerar que no han sido efectivos para evitar la quiebra de su integridad territorial. Si Zagreb veta la utilización de su suelo como base para la evacuación, o los serbios de Krajina se oponen a la retirada, los aliados deberían utilizar sólo suelo italiano como base de operaciones, lo que complicaría la operación y encarecería el coste.

El plan prevé que tendrá que desarrollarse en un medio hostil, no, de guerra abierta. Por eso no incluye la utilización de material pesado, sino armas ligeras y medias, y un empleo masivo de helicópteros. Algunas incógnitas se refieren al comportamiento de la población cuando vea retirarse a los responsables de la ayuda humanitaria.

El objetivo es rescatar a los hombres de la Fuerza de Protección de la ONU (Unprofor) con todo su material. Por eso, el mecanismo de evacuación se prolongaría durante diez semanas. La primera fase consiste en instalar la Organización de Mando y Control -fundamentalmente, los sistemas de comunicaciones- y en concentrar las tropas: ambas subfases exigen seis semanas. La segunda es el rescate, que duraría cuatro semanas. En total, dos meses y medio.El mando de la eventual operación correrá a cargo de la OTAN, finalizando así el mecanismo de la doble llave por el cual toda operación militar sobre Bosnia, hasta la más, insignificante, debe realizarse con el previo acuerdo de la ONU y la Alianza Atlántica.

De momento, la ONU no ha puesto reparos al final del sistema de la doble llave para esa operación, si llega a solicitarla. Washington ha exigido que el mando operativo radique en la OTAN, por su política de no intervenir con efectivos humanos de Tierra en Bosnia salvo en el caso de ir abanderados por la alianza militar. Esa exigencia encubre el deseo de EE UU de que el mando supremo de cualquier operación en que participen sus soldados sea encabezada por un militar norteamericano. Se da la circunstancia de que los dos más altos cargos militares de la OTAN son de esa nacionalidad.Otra cuestión polémica es la financiación. EE UU exige que sea la OTAN, y no la ONU, quien corra a cargo de ella, porque su participación en el presupuesto de Naciones Unidas es muy superior a su contribución financiera a la alianza militar.

El plan ha sido elaborado por el cuartel del Sur de la OTAN, ubicado en Nápoles, en estrecho contacto con los responsables de los cascos azules, y supervisado por el Comité ,Militar de la alianza, sin participación del Comité de Planes de Defensa, porque éste forma parte de la estructura militar integrada, y Francia -uno de los países presentes en la zona con cascos azules- permanece fuera de la misma.Expertos políticos y militares de Bruselas se muestran convencidos de que la actual e incompleta tregua militar no desembocará en un tratado de paz. Bastantes consideran, además, que el fracaso de la tregua será total, y que en primavera se recrudecerán las hostilidades. Ése puede ser también el momento en que el presidente Bill Clinton se vea impelido -por el. compromiso de otoño de levantar el embargo a Bosnia en seis meses si los serbiocroatas no asumían el plan de paz, y por la presión del Congreso- a levantar unilateralmente el embargo, y no simplei-nente descomprometerse de su vigilancia. En ese momento los países con cascos azules los evacuarian, como han anunciado, para evitar que los serbios los Considen como enemigos. Y ello constituiría el fracaso definitivo de los europeos.

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