El reajuste presupuestario deja a Obras Públicas sin 100.000 millones

José Borrell tendrá que rediseñar, sobre todo en carreteras, el programa de inversiones previstas por su equipo para 1995. El reajuste presupuestario aprobado en el último Consejo de Ministros asesta un importante golpe financiero a los planes del Ministerio de Obras Públicas, Transportes y Medio Ambiente (MOPTMA), que dispondrá de 100.000 millones de pesetas menos para invertir en obras públicas.

La criba presupuestaria supone una merma importante para este departamento, sobre el que recaerá el 18,18% del recorte de 550.000 millones de pesetas decidido por el Gobierno un mes después de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado.La redefinición de las prior¡dades del ministerio dilatará previsiblernente los plazos de ejecución de Obras Públicas que están pendientes, de adjudicación, aunque su titular, José Borrell, aseguré que no afectará a los proyectos que ya se encuentran en marcha. A la espera de "volver a echar las cuentas" para rediseñar. el mapa de inversiones, Borrell confía en mantener los proyectos de saneamientos y depuración de aguas que considera su principal prioridad en un momento "en el que España tiene unos problemas de abastecimiento tan graves". Los objetivos que se ha marcado el Moptma en política hidráulica gozarán pues de preferencia sobre las restantes infraestructuras como es el caso de las nuevas carreteras.

El AVE Madrid-Barcelona.

Si bien el ministro no concretó los proyectos que se demorarán, a raíz del reciente reajuste, dejó entrever que los planes del AVE en el tramo Madrid-Barcelona podrían sufrir alguna dilación por este motivo. "Considero más importante hoy en España la, política de, saneamiento de aguas que la de trenes de alta velocidad" , señaló. Los proyectos sobre el tramo Catalayud-Ricla y Záragoza-Lérida (en fase de estudio de impacto ambiental) habían sido programados para este ejercicio. Otras obras previstas para 1.995, como el inicio de 712 kilómetros de nuevas autovías a lo largo del corredor del Mediterráneo o las autovías gallegas cuentan con algunos tramos pendientes de adjudicación, lo que podría retrasar las obras a la vista del recorte ministerial.

El ministro, sin embargo, se negó a asumir toda la responsabilidad en la selección de proyectos públicos, que se dilatarán con la restricción presupuestaria e instó a los representantes de las diferentes fuerzas políticas a sumarse a un debate público para redefinir los objetivos inversores.

Conocer todas las opiniones

"A fin de cuentas", explicó Borrell, "los ministros hacemos lo que creemos que debemos hacer en función de las prioridades del país. Para eso es importante conocer la opinión de los diputados de todos los grupos". Al hilo de esta invitación, Borrell lanzó una velada crítica hacia quienes aplauden la disminución del gasto público al tiempo que demandan la ejecución de proyectos, "Todo el mundo está encantado de que disminuya la suma pero luego nadie quiere que disminuyan los sumandos". El ministro hizo también un llamamiento a "la sensatez" de la opinión pública para que "entienda" que el ajuste de los créditos inversores acarreará un cambio en los calendarios del programa del inversiones públicas.

Borrell, que inauguró ayer 20 kilómetros del tramo de autovía Almería-El Parador, aseguró que "el importante" reajuste del Gobierno le obligará a revisar la programación de la obra pública y a redistribuir "en el tiempo" los objetivos marcados por su ministerio para los próximos ejercicios.