"Nos estamos preparando para llevar la desgracia al lugar de donde vino"
El presidente checheno, general Dzhojar Dudáiev, lanzó anoche desde un refugio clandestino, en un encuentro con un reducido grupo de periodistas entre los que se hallaba el enviado de EL PAÍS, un llamamiento a la ONU, la OSCE (Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa) y a los principales dirigentes del mundo para que ', apliquen sanciones económicas a Rusia; ya que toda la ayuda que Moscú recibe la consume en la guerra".El líder rebelde se mostró muy preocupado por la "agresividad del Kremlin" y pidió que la comunidad internacional tome el control de las armas nucleares que Rusia posee. "No descarto que ahora que el Kremlin ha probado todas la armas a su disposición contra Chechenia se vea tentado a usar una bomba atómica de pequeña dimensión contra esta república", declaró en otro momento de la conversación con los periodistas.
Dudáiev pidió también a las grandes potencias que presionen para que la Federación Rusa pierda su condición de miembro permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Con respecto a la toma ayer del palacio presidencial de Grozni por parte de las fuerzas rusas, el general rebelde afirmó que sobre el edificio habían caído bombas de seis y nueve toneladas y que ya sólo quedaban las ruinas. "Esperábamos que ésto sucediera, así que alcanzamos a evacuar del sótano a los heridos y prisioneros rusos que allí había", dijo Dudáiev en la. reunión clandestina que a última hora de ayer tuvo con el reducido grupo de periodistas.
El líder checheno manifestó, por otra parte, que, a juzgar por los últimos acontecimientos, "ni el presidente, Borís Yeltsin, ni el primer ministro,Víctor Chernomirdin, controlan la situación en Rusia, y sobre todo el partido de la guerra, representado por el Consejo (le Seguridad ruso".
Dudáiev advirtió desde el refugio clandestino que "nos estamos preparando para llevar la desgracia al lugar de donde vino". Al explicar mejor tal amenaza, el presidente independentista manifestó que también 1as ciudades rusas pueden arder y no necesariamente con bombas de la aviación". Sobre los culpables directos de la agresión contra Chechenia,. el presidente declaró: "La caza ya ha comenzado. El pueblo checheno encontrarará la manera de castigar a los representantes de los partidos de la guerra". "Si es necesario los buscaremos por toda la tierra y los sacaremos del fondo del océano", añadió.
También otro representante de la república secesionista, el presidente del Parlamento, Akhiaíd Idigov, logró escapar con vida del palacio presidencial. "Este edificio era un símbolo de nuestra resistencia, pero nos dimos cuenta que teníamos que abandonarlo. No se puede hacer nada cuando una lluvia constante de bombas llegan hasta el sótano", dijo Idigov en una improvisada conferencia de prensa celebrada en un domicilio particular de Grozni a la que asistió una enviada de la agencia France Presse. "Se decidió abandonar el lugar hacia las cinco de la mañana y trasladar su cuartel general a otro sitio situado a un kilómetro aproximadamente de distancia", explicó el presidente del Parlamento. Idigov manifestó también que Chechenia "no se rinde". "No cederemos ni un ápice sobre nuestra independencia", sentenció.
