El Tesoro eleva la rentabilidad de las letras a seis meses y la confianza vuelve a los inversores en deuda

El dinero ha vuelto a las subastas de letras, lo que empieza a representar una vuelta a la tranquilidad. El Tesoro adjudicó ayer más de 456.000 millones de pesetas en letras a seis meses, después de elevar casi medio punto, hasta el 9,494%, el tipo de interés respecto a la subasta anterior, celebrada hace dos semanas. Los tipos de interés en los mercados monetarios continuaron ayer su tendencia a la baja, mientras la Bolsa de Madrid ganaba 0,32 puntos y la peseta se movía, poco, quedando a final de la tarde en 87,03 unidades por marco.El resultado de la subasta de letras a seis meses fue bien recibido tanto por los analistas como por los responsables del Tesoro. Hubo una alta oferta de dinero, más de 511.000 millones de pesetas -casi lo que vencía en. esta ocasión- a unos tipos suficientemente ajustados como para que el Tesoro asumiera la mayor parte del dinero ofrecido. Efectivamente, el Tesoro elevó desde el 9,01% de la primera semana de enero hasta el 9,494% el tipo marginal de la subasta y pudo emitir letras por algo más de 456.000 millones de pesetas.

Para los analistas "se ha roto el hielo" que había la semana pasada y "el dinero parece querer volver a la deuda pública". El director general del Tesoro, Manuel Conthe, dijo ayer que "se ha abierto un diferencial de 0,75 puntos entre las letras a seis meses y a un año, lo que permitirá que vaya una mayor cantidad de dinero a la subasta a un año de la semana próxima". "Con lo emitido hasta ahora en enero, y con las previsiones de la próxima semana, la financiación de enero puede quedar relativamente resuelta", dijo Conthe quien acepta que no se van a obtener recursos suficientes que equilibren los vencimientos -2,5 billones de pesetas- de este mes. En el primer trimestre vence deuda por valor de 4,7 billones de pesetas.

"Nos hemos beneficiado de ese tono de mayor tranquilidad en los mercados a medida que se va afianzado la idea de que el Banco de España subió los tipos solo para prevenir las tensiones inflacionistas", dijo Manuel Conthe, "como se demuestra en la flexión a la baja que vienen teniendo los tipos de interés en el mercado interbancario". El dinero a un ano se colocó en el 10,55%, con caída de 0,2 puntos, y a seis meses bajó al 9,6%.

Los mercados mantuvieron una tónica de tranquilidad, con algún movimiento de ganancia en el de la deuda, una tímida subida en la bolsa -el índice subió 32 centésimas, equivalente al 0,11%, hasta situarse en 282,22 puntos- y pocos movimientos en el tipo de cambio de la peseta que, a última hora de la tarde estaba anclado en 86,95 por marco, después de haber bajado hasta 86,80 y subido hasta 87,15.

Los problemas políticos siguen en Italia. El nuevo Gobierno tiene que ganar la confianza y piensa seguir el programa de privatizaciones. Por eso la lira bajó hasta 1.057,75 por marco, con pérdida de 11 liras. El dólar, mientras tanto, tampoco consigue remontar frente al marco. Frente a la peseta perdió unos céntimos cotizando a 132,85.