EE UU, dispuesto a aportar tropas en una misión de paz en los altos del Golán

El secretario de Defensa de Estados Unidos, William Perry, se entrevistó ayer, en su primer día de visita oficial a Israel, con el primer ministro, Isaac Rabin, con quien exploró la idea de una posible de paz de las tropas norteamericanas en los altos del Golán, territorio ócupado, por Israel en 1967 y cuya devolución exige Siria como condición previa a cualquier acuerdo con Israel similar a los rubricados por los palestinos y jordanos.

El titular del Pentágono dijo tras el encuentro que, a pesar de la disponibilidad norteamericana, es aún prematuro el estacionamiento de tropas de EE UU en el Golán. Lo que sí subrayó es el compromiso de su Gobierno de mantener la seguridad y la superioridad militar de Israel en Oriente Próximo.Un eventual acuerdo de paz entre Israel y Siria que provocara la retirada total, parcial o por etapas de las tropas israelíes de los altos del Golán podría contar con el apoyo activo de Estados Unidos. Incluso con el de tropas.

El diario israelí Haaretz asegura en su edición de ayer, citando fuentes militares, que el presidente sirio, Hafez el Assad, está decidido a alcanzar un acuerdo de paz con Israel, a pesar de que los "progresos son lentos".

La oposición al Gobierno laborista israelí, encabezada por el líder del partido Likud, Benjamin Netanyahu, ha pedido a Perry que escuche otras voces diferentes a las de Rabin. "Es importante que sepa que cuando está hablando con un Gobierno que quiere entregar los Altos del Golán, está hablando con un Gobierno minoritario".

El segundo asunto de la reunión Perry-Rabin ha sido el nuclear. Antes de partir de El Cairo, su primera etapa de la gira actual que le llevará mañana a Pakistán, Perry declaró que "uno de los peligros más graves con los que se enfrenta el mundo en esta década es que una nación descarriada o unos terroristas se hagan con una, cinco o una do cena de cabezas nucleares y amenacen al mundo con ellas".

El secretario norteamericano de Defensa se refería como "nación descarriada" a Irán, país que ha sido señalado en recientes informes periodísticos como capaz de tener en menos de cinco años armas nucleares propias. Teherán ha negado estas acusaciones. En este sentido, ayer se supo que Rusia ha acordado con las autoridades iraníes terminar el reactor nuclear de Bushehr, en la costa del Golfo Pérsico. La construcción de esta central se inició antes, de la victoria de la Revolución en 1979. El coste de los trabajos pendientes asciende a 800 millones de dólares (más de 100.000 millones de pesetas). El presidente palestino, Yasir Arafat, se reunirá hoy con el ministro israelí de Exteriores, Simón Peres, para tratar de la retirada de las tropas israelíes de los principales núcleos urbanos de Cisjordania. Este punto, ligado a las elecciones palestinas, hizo fracasar el último encuentro de la comisión de enlace.

Uno de los dirigentes de los colonos de los asentamientos judíos de Cisjordania, irritado por lo que juzga posición claudicante del Ejecutivo, ha convocado a "frenar con nuestro cuerpo al sangriento Gobierno de Rabin".