De Daguerre a Lumière

La creación del cine es una larga y apasionante aventura de la imaginación científica: el capítulo final del perfeccionamiento del inmemorial espectáculo de las Sombras Chinescas, que en Europa fueron una de las alquimias de los juegos de salón del, Siglo de las Luces y que en, 1822 condujeron a un aparato llamado Diorama, generador de los llamados daguerrotipos, pues fue creado por un francés llamado Louis Jacques Daguerre.De ese crucial instante embrión de una revolución del comportamiento, ya que ahí comenzó una mutación en los mecanismos de la percepción humana- a la creación del Cinematógrafo de los hermanos Lumiére, hay muchos. pequeños saltos, que, condensamos en unos pocos decisivos.

En 1855, el norteamericano George Eastman inventó un soporte de papel flexible qué permitió crear series secuenciales de dibujos que capturaban las fases de un movimiento. En 1856, Louis Le Prince construyó un aparato. óptico capaz de hacer visible en un solo encuadre esta dinámica, y Eastman mejoré la consistencia y translucidez del soporte de papel, cambiándolo por otro « fabricado con celulosa: lo que hoy llamamos celuloide.

Los artilugios para contemplar estas series analíticas de un movimiento se suceden en Europa y EE UU; y conducen, en 1877,, al invento del Praxiscopio y del Teatro Óptico por otro francés: Emile Reynaud, paralelos al hallazgo que dos años después (1879) logró el norteamericano Eadweard Muybrigde, cuando inventó el Zoopraxiscopio, con el que capturé el movimiento de figuras humanas y animales fotografiados en serie.

Un fotógrafo escocés llamado William Dickson, que trabajaba en la factoría del norteamericano Thomas Alva Edison, se las ingenió para hacer en 1891 una cadena de muescas taladradas en los bordes del celuloide de Eastman. Así nació lo que llamamos película, que Edison aprovechó para crear, en el aIba del cine, su Kinetoscopio, que algunos creen el verdadero nacimiento del cine en América.

En realidad, el cine no nace con la de la película taladrada y su visión individual en el Kinetoscopio, sino con un aparato capaz de proyectarla a distancia sobre una pantalla receptora y convertir la imagen en movimiento en espectáculo colectivo. Este aparato fue construido en una sola noche por Louis Lumiére, ayudado por su hermano Auguste; y con él se proyectaron las dos películas fundacionales del Grand Café: la salida de los obreros de una fábrica y la célebre locomotora que aterró y fascinó a los primeros cinéfilos de la historia.