La jaula interior

La agrupación vasca Traspasos hace una producción ambiciosa, que quiere ser compleja escénicamente y desmarcarse de lo domestico. No lo consiguen al completo, y tanto montaje como baile, propiamente dicho, a veces no sobrepasa el, ejercicio de taller o la propuesta donde no hay poso coreográfico más allá de ciertos pasos hechos con discreta corrección.La lección está redicha: el realizador de danza debe ser realista, producir lo que le permita dignamente presentarse ante el público, y pensar muchísimo dónde se tiene un espectáculo como tal y dónde fragmentos que apenas son parte de un todo ideal, soñado. Se acercan las bailarinas en la estética a recursos de Nikolais, de Momix o de ese uso descarnado de.la mujer que ya otras coreógrafas han explotado con me or fortuna (Carlson, Keesmaker, Linke). Aquí, la dinámica la pone el collage musical, donde hay de todo como en botica, sin que el oído del espectador pueda trazar una línea estilística que le guie.

A base de números cortos, las escenas de Sombrisas cuentan algo que va desde un humor gestionado tópicamente a un drama que no se puede leen Hay danzas de, objetos cotidianos (mesas, sillas, puertas, jaulas para periquitos) y un complicado dispositivo que debe caer de golpe para dar el efecto de derrumbe de las apariencias. Es el momento clave, pero los trajes francamente feos- deslucen la acción y ocultan el baile con esmero. La danza de cámara no necesita de ciertas especulaciones formales; se trata de un trabajo más cercano y acaso más limpio.

Iniciativa feliz

Para la danza contemporánea española, iniciativas como la de, la sala Imperdible con su Mes de la Danza son fundamentales ahora que, de alguna manera, no sólo soplan el viento de la desazón, sino que, por arte de las estructuras, se la ve abocada a lo alternativo, que genéricamente querrá decir lo independiente. Quizá tal circunstancia, dentro de su dureza, regenere vitalidades hoy casi perdidas y dé nuevas perspectivas a una corriente de nueva danza que nada en círculos cada vez más estrechos.La programacion es imaginativa, variada y demuestra un honesto interés por el baile actual y sus artistas. El público llenó la sala el primer día, y los vídeos y las exposiciones daban un ambiente cálido de participación.