_
_
_
_
Crítica:CINE
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Un actor de talento en un filme banal

Second best (literalmente, el suplente; pero parece que ya ni se molestan en castellanizar los títulos de las películas) es un mortecino pero al mismo tiempo lacrimógeno melodrama de chico con problemas, algo así como un cuidado vehículo para el regreso al estrellato de William Hurt, divo errático en los últimos años. La astucia de la operación que le da origen, orquestada por el ex director de fotografía Chris Menges -el director de Un mundo áparte-, es considerable, y consiste en arropar a Hurt de un tema "humano" -¿hay alguno más entrañable que la infancia desprotegida?- y unos actores secundarios excelentes -entre ellos, el mismísimo John Hurt, cuya aparición no pasa de lo amistoso- para hacer que el divo brille con luz propia sobre el conjunto. Y si bien es cierto que el film aparece como una indecente operación de lagrimeo facilón y más bien blandengue, el objetivo principal se cumple: Hurt vuelve por sus fueros y demuestras, por si hacía falta, la enorme solvencia de su oficio.El film cuenta el encuentro de dos soledades profundas. Todo el film muestra el proceso de convergencia entre William Hurt y el niño Chris Cleary, pautado por enfrentamientos violentos y pausas que presagian el happy end que es de rigor en estos casos.

Second best

Dirección: Chris Menges. Guión: David Cook según su novela. Fotografía: Ashley Rowe. Música: Simon Boswell. Producción: Sarah Radclyffe para Fron Film, Gran Bretaña, 1994. Intérpretes: William Hurt, Chris Cleary Miles, John Hurt, Jane Horroks. Estreno en Madrid. Cine Princesa.

Más información
"Soy fiel a mis principios"

Pero la nómina de los recursos baratos de guión que el film exhibe sin ningún pudor hace de él un producto maniqueo y tramposo, un señuelo para la identificación fácil, instantánea del espectador con ambos personajes.

Second best se ve como un mélo sin arrebato, una película previsible y ramplona; a la postre, ya está dicho, lo único que en ella brilla es el talento de Hurt, matizando un personaje gris y banal.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_