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Leguina felicita a los 'híper' españoles por cerrar y multará a los multinacionales

Javier Casqueiro

La regulación de los horarios comerciales se ha convertido en un debate de interés nacional con repercusiones multinacionales. La Consejería de Economía de la Comunidad de Madrid tomó partido ayer por las empresas españolas del sector, que acataron su autoridad al cerrar el pasado viernes tras la insurrección suscitada por siete hipermercados de capital extranjero. Éstos abrieron y serán sancionados con multas que no se concretarán hasta dentro de dos meses y que pueden oscilar entre 2,5 millones, y 100 millones de pesetas.

La Consejería de Economía considera agravante, en este caso, la posición de fuerza de las multinacionales y el beneficio que han obtenido al abrir sus hipermercados. En un comunicado oficial, la Comunidad no admite matices en su calificación de lo sucedido y considera "muy graves las actuaciones de algunas empresas, por su situación de predominio en el mercado, la capacidad económica de las mismas, el beneficio ilícito obtenido y el grado de voluntariedad manifiesto en el incumplimiento".Por todas estas razones, la Consejería de Economía entiende que la actuación de estas empresas rebeldes a la normativa que prohibía la apertura "las sitúa en un grado de insumisión que perjudica gravemente los intereses del resto de los empresarios de nuestra capital".

En ningún momento se hace mención explícita a estas empresas por el origen de su capital. De los siete hipermercados que vulneraron la orden de cerrar los comercios, seis pertenecen a tres multinacionales francesas (Alcampo, Continente y Pryca) y uno a una portuguesa (Jumbo). Sin embargo, sí se "reconoce y felicita el comportamiento cívico de los miles de empresarios madrileños que han acatado la orden de la Comunidad, incluidos los grandes empresarios madrileños (Corte Inglés, Hipercor, Galerías Preciados, Grupo Cortefiel, Simago y Alfaro), que con su actitud confirman la conveniencia de seguir actuando, decididamente, en defensa de los intereses de nuestros agentes económicos madrileños". No se señala que son de capital español pero se destaca su condición de madrileñas tres veces.

El consejero de Economía, José Luis Fernández Noriega, y su director regional de Comercio, Enrique Zaragoza, acordaron ayer abrir el expediente sancionador para todos los centros citados y a una decena de supermercados de la cadena Expreso. Las patronales de los pequeños comerciantes -Cecoma y Copyme- presentaron por su parte las denuncias contra esas firmas y apostillaron: "Se ha impuesto la dictadura del dinero, capaz de comprar hasta conciencias".

José Serrano, el presidente de la patronal de las grandes superficies, se extrañó de que se hablase ya ayer de la cuantía de las multas nada más iniciado el expediente sancionador. Insistió en que habrá recursos. Sobre el origen extranjero del capital de las empresas multadas, Serrano señaló: "Para mí todas son madrileñas porque yo el capital no se lo pregunto a nadie".

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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