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Los pilotos de la ONU búsan volar a Tuzla por falta de seguridad

Los pilotos de tres aviones de las Fuerzas de Protección de la ONU (Unprofor) que debían aterrizar ayer en el aeropuerto de Tuzla (al norte de Bosnia) rehusaron despegar de Zagreb, por motivos de seguridad, tras el bombardeo de las fuerzas serbias el martes contra las instalaciones del aeródromo. "Los pilotos son civiles contratados por Unprofor" y los aviones "son aparatos ucranios" Ifluchin 76, precisó el comandante Rob Annink, portavoz de Unprofor.

El martes, el primer avión de la ONU que aterrizó en Tuzla fue recibido con nueve proyectiles disparados por los tanques serbios que controlan las colinas alrededor del aeropuerto. El avión realizó un despegue de urgencia. Los aparatos esperados ayer en Tuzla debían transportar una parte del contingente de cascos azules jordanos con equipos de radar de trayectografía, que permiten identificar la procedencia de los bombardeos de artillería de las fuerzas serbias y musulmanas en la región.Varios proyectiles de grueso calibre cayeron en el centro de Tuzla sin provocar víctimas. Uno de ellos alcanzó de nuevo el hotel Tuzla, en el que se alojan habitualmente observadores de la ONU y periodistas. Esta ciudad septentrional, de 170.000 habitantes de los que 60.000 son refugiados, es una de las seis zonas de seguridad teóricamente protegidas por la ONU en Bosnia.

Desde hace una semana Tuzla es bombardeada diariamente por las baterías y tanques serbios que la rodean desde tres frentes, sin que hasta el momento la OTAN haya. lanzado un bombardeo de represalia.

En Sarajevo, los 11 franceses de la asociación humanitaria Primeros Auxilios en poder de los serbios desde el pasado 8 de abril fueron liberados ayer a primera hora de la tarde. Los liberados, acusados de contrabando de armas a favor de los musulmanes, fueron trasladados en vehículo del cuartel sérbio de Lukavica al aeropuerto de Sarajevo, donde fueron evacuados en helicóptero.

Tregua de cuatro meses

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En el terreno de las negociaciones, desde los bandos en conflicto se percibían ayer las primeras señales favorables a aceptar la tregua de cuatro meses propuesta por Estados Unidos, Rusia y la Unión Europea (UE). El serbio Mirko Pejanovic, miembro de la presidencia bosnia (de mayoría musulmana) dijo que "en términos generales la propuesta es aceptable", aunque preferiría un periodo más corto.

El líder de las fuerzas serbias Radovan Karadzic manifestó, por su parte, su deseo de firmar "pronto un alto el fuego global en toda Bosnia". Los musulmanes se muestran en principio reticentes a aceptar una tregua de cuatro meses por considerar que un plazo excesivamente largo sería aprovechado por los serbios para consolidar sus conquistas territoriales (más de un 70%).

Karadzic también advirtió a la comunidad internacional sobre la ofensiva de las fuerzas bosnias en el norte de Bosnia. Los comandantes militares han indicado que el avance de sus tropas en la última semana amenaza con cortar una ruta de abastecimiento de vital importancia para las fuerzas serbias de Bosnia oriental hacia su cuartel general en Pale, en las afueras de Sarajevo.

Una granada de mortero estalló en el aeropuerto de la capital bosnia, protegido por las fuerzas de Naciones Unidas, en una clara violación de la zona de exclusión de 20 kilómetros impuesta por la Alianza Atlántica. Los observadores militares no pudieron confirmar si el ataque fue obra de los soldados serbios o musulmanes que mantienen sus posiciones en las proximidades del aeropuerto.

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