Los ecologistas de Colmenar que se enfrentaron a FCC cumplen su arresto

Ocho ecologistas de la comarca de Colmenar Viejo (26.000 habitantes) han cumplido cinco días de arresto domiciliario por encadenarse el año pasado en la cañada de Remedios como protesta contra el deterioro de esta vía pecuaria por el paso de camiones de la empresa Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) al inicio de las obras de la cárcel de Soto del Real (2.900 habitantes). Mientras una juez dictaminé que los ecologistas ejercían coacción contra la empresa, otros dos jueces les absolvieron por estos hechos en juicios posteriores.El año pasado, vestidos de presidiarios, reían y repartían chorizos con pasquines a los conductores que circulaban junto a la finca Los Cierros de San Bartolomé, donde ahora se culmina la construcción de la cárcel de Soto del Real. No sólo participaron en todas las manifestaciones convocadas durante año y medio contra el penal, sino que pedían a los políticos locales que adoptasen medidas drásticas, aunque sin éxito. Acudieron a la Asamblea de Madrid, donde después de sacar una pancarta y causar carcajadas fueron desalojados por la fuerza. Emplearon tiempo y dinero de sus propios bolsillos en aras de lo que consideraban un atropello, una macroinstalación en las lindes del parque regional de la cuenca alta del Manzanares.

Sin embargo, fueron sus protestas por el deterioro de la cañada de Remedios las que les llevarían a los tribunales.

Todos los sábados

Los sábados por la mañana, en pleno invierno del 93, acompañados de otra decena de vecinos y ecologistas, se situaban encadenados a lo ancho de dicha cañada, paso habitual de ganado. La Guardia Civil les requería el DNI, pero los camiones esos días cesaban de trasladar los escombros desde la cárcel hasta la cantera de Steeley.En esas manifestaciones no hubo contacto con camioneros ni representantes de FCC; por esa razón, dos jueces de la Audiencia Provincial de Madrid determinaron el pasado abril que "los ecologistas ejercían su libertad de expresión" en los juicios promovidos por la empresa. No así una juez de Colmenar Viejo, Esther Lobo, que, después de que su antecesora absolviera a los ecologistas y FCC volviera a presentar un recurso por coacción, sentenció cinco días de arresto domiciliario para 8 de los 12 hasta entonces encausados.

El pasado sábado, Rafael de Francisco estuvo arrestado en su casa, no pudo salir durante 24 horas más allá de su jardín, y agentes de la Policía Municipal le visitaron al menos tres veces sin avisar. Así han cumplido ya la condena sus compañeros de fatigas: Dana Woodward, María Ángeles Navarro, Julia Lama y los matrimonios formados por Francisco Monasterio y Juana Gutiérrez, Evaristo Pozas y María Victoria Lama.