Los Doce ofrecen un trato de asociado a Ucrania si desmantela su fuerza nuclear

La Unión Europea (UE) desea neutralizar los peligros potenciales que representa actualmente Ucrania, un país que no ha conseguido fijar todavía su rumbo político y que cuenta con dos amenazas serias para la seguridad del continente: la peligrosísima central de Chernóbil, todavía en marcha, y las armas nucleares. Los Doce dieron ayer su aprobación inicial. a un acuerdo de asociación que pretende resolver estos problemas, a cambio de la firma del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares.

El paquete de medidas preparado por la UE para atar en corto a Ucrania incluye un acuerdo de asociación, que se aprobará en su forma definitiva y posiblemente solemne en la cumbre europea de Corfú los 24 y 25 de junio, junto a otro acuerdo de gran trascendencia: el de Rusia, si todo sale finalmente según los propósitos de la Comisión Europea.Cuenta también con el Pacto de Estabilidad para Europa que se pondrá en marcha a finales de mayo en París con el objetivo de prevenir los conflictos fronterizos y de minorías en los países de Europa central y oriental. Incluye, finalmente, una importante, ayuda económica por diversos conceptos.

Toda la acción sobre Ucrania estará enmarcada posible mente en una Acción Común de la nueva PESC (Política Exterior y de Seguridad Común). La condición previa es que Ucrania ratifique el Pacto de No Proliferación de Armas Nucleares y deje de ser, en con secuencia, una potencia atómica situada en el corazón del continente, entre otras dos grandes potencias: Rusia y la UE.

Los dirigentes europeos no desean que la presión sea excesiva para no ofender a los ucranios, pero no hay dudas al respecto. "Vamos a ver cómo vinculamos suavemente ambas cosas", aseguró el ministro de Exteriores, Javier Solana, quien repitió más tarde que se trata "de un condicionamiento suave, laxo, pero no total".

La ayuda económica que debe preparar la UE se dirige a tres objetivos: financiar las dos centrales nucleares nuevas que permitan cerrar definitivamente Chernóbil y, a más corto plazo, resolver los problemas alimentarios que tiene la población ucraniana y proporcionar ayuda financiera para equilibrar la balanza de pagos, una vez se cumplan los requisitos que exige el Fondo Monetario Internacional. Solana habló de "enorme preocupación" por la seguridad nuclear en Ucrania y sus efectos sobre el resto del continente.Acuerdo de GinebraEl Consejo de Ministros de la UE dio también su visto bueno a la última versión del plan de paz para Bosnia y decidió llamar a las partes en conflicto a un alto el fuego definitivo y a una negociación final. Los ministros de Exteriores de los cuatro candidatos a ingresar en la UE (Austria, Finlandia, Suecia y Noruega) asistieron ayer por primera vez a un Consejo para debatir sobre el plan de paz para Bosnia acordado por rusos, norteamericanos y europeos el pasado viernes en Ginebra.

"Hemos sido capaces de coordinar, quizás por primera vez, una posición común entre Estados Unidos, la Unión Europea y Rusia", aseguró el ministro de Exteriores español. "El acuerdo se enmarca en la posición inicial de la UE", indicó Solana, quien recordó que no ha cambiado el reparto territorial (51% para los musulmanes y los croatas bosnios y 49% para los serbios bosnios).

Los ministros de Exteriores ultimaron también el plan de ayuda económica de 32 millones de ecus (5.120 millones de pesetas) para la reconstrucción de Mostar, que "debe ser uno de los éxitos emblemáticos de la Unión Europea", según palabras de Javier Solana.