Obras Públicas y Generalitat invertirán 400.000 millones en el delta del Llobregat
El delta del río Llobregat, junto a Barcelona, se convertirá en un gran centro direccional o plataforma logística que dé respuesta a las nuevas demandas de transporte y tratamiento de mercancías que lleguen al aeropuerto y al puerto, instalaciones ambas que serán ampliadas. El ministro de Obras Públicas, José Borrell, y el consejero de Política Territorial de la Generalitat, Josep Maria Cullell, firmaron ayer un convenio que supone una inversión directa en obras e infraestructuras de 400.000 millones de pesetas de aquí a diez años. La desembocadura del río será desviada tres Kilómetros al sur.
La mayor parte de esta inversión corresponderá al Ministerio de Obras Públicas. El plan de infraestructuras del delta trata de aprovechar las potencialidades de esa llanura -la única cercana a Barcelona y que, además, está poco urbanizada- para configurar un gran centro que saque partido de la existencia del aeropuerto y del puerto y coordine los diversos modos en el transporte combinado de mercancías: por carretera, ferroviario, aéreo y marítimo, junto a otros servicios como telecomunicaciones avanzadas y un régimen aduanero integrado.Se trata de distribuir mercancías desde Barcelona a toda España y parte de Europa de forma rápida y barata. El puerto de Barcelona aspira a convertirse en el punto de arribada natural de contenedores procedentes del área del Pacífico a través del canal de Suez, compitiendo con los grandes puertos del norte de Europa, mucho más alejados de esa ruta.
La ampliación del puerto permitirá edificar una zona de actividades logísticas (ZAL) que aprovechará las operaciones de transporte para incorporar en las mercancías operaciones que aporten un valor añadido en el campo del embalaje, etiquetado, montaje de piezas, terminación de productos, almacenamiento y distribución a los clientes. El proyecto hace necesario desviar la desembocadura del Llobregat tres kilómetros al sur.
Para que esta plataforma funcione es necesario mejorar las conexiones terrestres con el resto de España y con Portugal y Francia.
El plan prevé la construcción de nuevas autovías y una nueva línea férrea exclusiva para el transporte de mercancías. El convenio incluye también medidas e instalaciones para proteger y mejorar el medio ambiente: conservación de humedales, regeneración de costas y depuración de aguas residuales.
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