El Gobierno impulsa el parque de Picos de Europa y la etiqueta ecológica

El controvertido parque nacional de Picos de Europa recibió ayer un nuevo impulso. El Consejo de Ministros aprobó el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORNA) de este espacio, uno de los principales objetivos del Gobierno, para ampliar la actual red de parques nacionales. El PORNA es el preámbulo imprescindible a la creación de todo parque nacional. El Gobierno también dictó ayer las normas para aplicar la directiva de la UE sobre la etiqueta ecológica.

La declaración de un nuevo parque nacional debe hacerse por anteproyecto de ley remitido al Parlamento. Son las Cortes las que finalmente lo deciden. El proyecto del Parque Nacional de Picos de Europa amplía el actual de Covadonga, creado hace 75 años, a zonas de Cantabria, Asturias y Castilla y León. La ampliación implica pasar de 17.000 hectáreas a más de 63.000; o sea, cuadruplicar el espacio a proteger. Esa extensión lo convertiría en el mayor parque nacional, superando al de Doñana (50.700 hectáreas). Los pueblos afectados se han opuesto a la creación de este parque, especialmente los cántabros y leoneses. Según el Ministerio de Agricultura, el PORNA contempla el apoyo, al desarrollo sostenible mediante la promoción del turismo rural y los artículos artesanales, como el queso.Más espacios protegidos

Las montañas de los Picos de Europa son objetivo prioritario del Gobierno en la ampliación de la actual red de parques. El proyecto es pasar de los nueve actuales a 12 o 13. Sin embargo, las organizaciones ecologistas consideran insuficiente este aumento. Esta semana, la Coordinadora de Organizaciones de Defensa Ambiental (CODA) y Amigos de la Tierra han presentado sus propuestas de redes de parques nacionales. Amigos de la Tierra propone crear 26 parques nacionales, que cubren 600.000 hectáreas. CODA sugiere ampliar la red a 32 parques, con 2,7 millones de hectáreas. En pedir la máxima protección para Picos coinciden el Gobierno y los ecologistas.

Esta cadena montañosa -bosque atlántico de gran valor paisajístico- constituye un ecosistema único en el continente europeo. Se trata de una importante masa carbonífera con espléndidas formaciones kársticas, entre las que se encuentran una de las mayores simas del mundo.

Abundan los hayedos y robledales con alisos, fresnos, nogales, cerezos silvestres, abedules, tejos y sauces. Respecto a la fauna, se han contabilizado 30 especies de reptiles y anfibios, 130 de aves y 50 de mamíferos. En Picos se encuentra la población de rebecos más numerosa de España, con más de 2.000 ejemplares, además de poblaciones de oso pardo, lobo, corzo, gato montés, marta, nutria y urogallo.

Además, el Consejo de Ministros aprobó ayer un real decreto en el que se definen las normas para aplicar en España el reglamento de la Unión Europea para conceder la etiqueta ecológica, proceso que lleva año y medio de retraso. Con esta etiqueta se trata de promocionar aquellos productos menos agresivos con el medio ambiente.

Serán los Gobiernos autónomos los encargados de designar los organismos competentes para otorgar la etiqueta. En las comunidades que no lo hagan, un organismo nombrado por la Secretaría de Estado de Medio Ambiente y Vivienda concederá las etiquetas. La Asociación Española de Normalización (AENOR) es el organismo nombrado provisionalmente para desarrollar esta función.

El entramado de concesión de este logotipo con forma de margarita es complicadísimo, por estar en juego muchos intereses empresariales. Hasta ahora, y tras varios años de negociación, la Comisión Europea sólo ha conseguido establecer los criterios para lavadoras, lavavajillas y papeles higiénicos y de cocina.