Hacienda fija que cada inspector levante actas por una media de 500 millones

El plan de inspección que para este año ha diseñado el Ministerio de Hacienda se concentra en seis sectores: profesionales, inmobiliario, sociedades y sus socios, IVA y renunciantes a la estimación objetiva por módulos y activos financieros. Según las instrucciones enviadas a las unidades territoriales, el objetivo de Hacienda es que cada inspector levante actas este año por un valor entre 400 y 600 millones de pesetas.

Ese objetivo supone un 20% más que el año anterior. La menor o mayor cuantía depende de si trabajan en zonas con mayor o menor actividad económica. En total, se inspeccionará a 80.600 contribuyentes.Los seis sectores son los considerados de "alto riesgo" por el plan de inspección de Hacienda diseñado para este año en cuanto a sus posibilidades de fraude fiscal. El de mayor importancia es el fraude en el impuesto sobre el valor añadido, sobre todo a través de facturas falsas y el detectado tras la desaparición de las fronteras con la Comunidad Europea.

Mientras el fraude del IVA está distribuido en todo el territorio nacional, el que se ha detectado entre los profesionales se centra sobre todo en Madrid, Barcelona y Valencia. La práctica más extendida entre este colectivo es el cobro por la prestación de servicios a través de sociedades. Con ello se consigue que las ganancias tributen al tipo del impuesto de sociedades (35%), sensiblemente más bajo que el del impuesto sobre la renta.

La investigación sobre las sociedades se extenderá también a sus accionistas, porque se ha detectado poca transparencia en las operaciones entre ambos con el fin de ahorrar impuestos. Los pequeños empresarios que hayan renunciado a aplicarse en su declaración de renta el sistema de estimación objetiva por módulos es, igualmente, otro de los colectivos donde se centrará la vigilancia este año. En el sector Financiero, se actúa especialmente sobre los fondos de inversión.

En el sector inmobiliario, muy relacionado con las facturas falsas de IVA, también se han detectado otro tipo de operaciones que persiguen camuflar plusvalías. Por ejemplo, en la compraventa de terrenos, una práctica extendida es que las transacciones se efectúen a través de sociedades interpuestas, en las que se colocan las plusvalías o las minusvalías, según convenga. Algunas sentencias judiciales ya han anulado operaciones de este tipo.

Estos seis sectores de especial vigilancia se detallan en una instrucción enviada por la Agencia Tributarla a las unidades regionales como parte del plan de inspección de este año. El objetivo que se marca es que cada inspector -789 en la actualidad- levante este año actas por entre 400 y 600 millones de pesetas, un 20% más que el año anterior. La cantidad está planteada como una meta flexible, aunque parte de la remuneración de los inspectores fiscales está ligada a ella.

El abanico de entre 400 y 600 millones obedece, además, a que no es lo mismo actuar en una ciudad como Madrid, con mayor potencial económico y en consecuencia de fraude, que en una capital de provincia de menor tamaño.