"Vivir es leer", dice Lledó al inaugurar el II Seminario La Sociedad Lectora

El II Seminario La Sociedad Lectora se inauguró ayer en Madrid con una conferencia de Emilio Lledó titulada La voz de la lectura. El seminario, que se desarrollará hasta mañana en el Centro Cultural del Círculo de Lectores, pretende ser un foro de reflexión sobre el papel del escritor en la sociedad lectora.El filósofo y académico Emilio Lledó intentó trazar el espacio histórico y teórico en el que emerge el fenómeno de la lectura y para ello se remontó a los orígenes del lenguaje. "Vivir es leer", afirmó Lledó, "vivir es interpretar, traducir".

Es en esa interpretación del mundo, en esa "digestión" de lo que el hombre registra del mundo externo a través de su percepción interior, donde se da la primera traducción, la primera lectura. "El lenguaje descubre el mundo especulativo (de especular, espejo, reflejo de una realidad objetiva) que irá a dar forma a la vida mental", afirmó Lledó.

El filósofo señaló que al nombrar los objetos externos el hombre creó también la consciencia de sí mismo, y, posteriormente, los conceptos más abstractos. "Esas palabras abstractas, esa voz de la letra, existe, tiene cuerpo. Se han creado por una necesidad de invención de un espacio teórico. En él lo real es lo ideal, el horizonte que nos aleja de la animalidad". Lledó considera que en la actualidad es necesario repensar algunas de las grandes palabras que han sostenido el espíritu de la humanidad: palabras como razón, verdad, solidaridad. Palabras banalizadas o deforinadas por su circulación en nuestra paradójica era del exceso de información, que sólo contribuye al ruido confuso, al engaño.

Soñar palabras

Para ello propone recurrir al legado escrito, a la voz del pasado: "Soñar los sueños de las palabras, porque al soñarlos los despertamos y nos espertamos nosotros mismos con ellas".La cultura de la imagen es para Lledó una amenaza para la lectura, al ofrecer una lectura de mensajes demasiado triviales, efimeros. "Hace falta una crítica al valor supremo de las imágenes, a la imagolatría, a la inmediatez de lo real que propone una visión sin sustancia, una visión que es en realidad, una ausencia". No rechaza las virtudes comunicadoras de la imagen, pero espera que "ese golpe para los ojos rompa a hablar". Son las palabras las que forjan el pensamiento, porque "un universo visual no funciona sin el cauce del lenguaje". "Las palabras nos enseñan a ver las imágenes", dice.

. El acto de presentación contó también con las intervenciones del director del Círculo de Lectores, Han,s Meinke, y la ministra de Cultura, Carmen Alborch. Esta última se limitó a comentar la conferencia de Lledó señalando la necesidad de hallar las formas de fomentar eficazmente la lectura. "La lectura es un placer que nos adentra en mundos que sólo se pueden alcanzar con la imaginación y el pensamiento. Debemos lograr que mucha gente aprenda a disfrutar de ese placer", dijo.