Duro enfrentamiento entre Rubalcaba y Cascos durante un almuerzo público
El ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el secretario general del Partido Popular (PP), Francisco Álvarez Cascos, se enzarzaron ayer en Madrid en una dura pugna verbal sobre la gestión del Gobierno y la labor de oposición de los populares, durante un almuerzo organizado por el Instituto de Estudios Económicos. Ambos dirigentes se cruzaron acusaciones sobre la participación de sus partidos en actos de transfuguismo político y la falta de disposición de sus formaciones para la regeneración de la vida política del país.La confrontación surgió cuando Álvarez Cascos tomó la palabra para hacer un negativo balance sobre la gestión de los socialistas en el Gobierno desde las elecciones del 6-J. El dirigente del Partido Popular afirmó que el Ejecutivo es "débil" ' carece de proyecto político de Estado y suele ceder a las presiones de los partidos nacionalistas. "Un día se le saca provecho en la cesión del 15% del IRPF y otro se le reclaman nuevas competencias que suponen la negación de los principios constitucionales en los que se asienta el Estado de las autonomías", aseguró el número dos del PP.
El secretario general de los populares aseguró que el llamado pacto social "ha sido una promesa incumplida más por parte del Gobierno, cuyo fracaso [del pacto] ha llevado a la huelga general del pasado 27-E.
Pérez Rubalcaba lamentó la intervención del dirigente del PP, al considerar que ese acto -en el que se presentaban varios libros sobre el sistema legislativo y judicial-, no era el lugar idóneo para entablar polémicas. Sin embargo, acusó al PP de estar haciendo "una pesadísima digestión" de las últimas elecciones, "para la que no caben Alka Seltzer ni bicarbonatos".
El ministro pidió a Álvarez Cascos que sea "más cauteloso al hablar de transfuguismo", y le recordó que el PP ha accedido recientemente a la alcaldía de Mojácar (Almería) gracias ' a un concejal del PSOE. Además indicó que las acusaciones de debilidad del Gobierno son falsas y alegó que el PP lo sabe "y por eso sufre".
