Hacienda lanza una ofensiva contra todas las formas de fraude

En un tono menos escandaloso y más autocrítico, el Ministerio de Hacienda presentó ayer su nueva ofensiva contra el fraude fiscal, en el desempleo, a la Seguridad Social y en las prestaciones farmacéuticas. El punto de partida es un informe elaborado por la Unidad de Lucha contra el Fraude, que apunta "importantes defectos y omisiones en las prácticas y en la coordinación informativa entre los diversos órganos de la Administración". Igualmente, se considera negativa "la complejidad, el casuismo y la variabilidad" de las normas tributarias" y se propone dar publicidad a las sanciones más "relevantes" como medida de ejemplaridad.Durante la presentación de este informe, el secretario de Estado de Hacienda, Enrique Martínez Robles, no ofreció una cuantificación del fenómeno del fraude, pero sí dijo que los servicios de la inspección tienen conocimiento exacto de sus principales manifestaciones. Explicó que "se trata de un volúmen importante" pero relativo ya que "en los últimos años ha mejorado considerablemente el grado de cumplimiento fiscal". A este primer informe seguirá otro definitivo en junio. Las primeras propuestas son las siguientes:

Fraude fiscal. Mejorar la asistencia al contribuyente y dar estabilidad, claridad y fiabilidad al sistema normativo. Revisión del sistema de infracciones y sanciones y reforma del delito fiscal. Adaptación de la normativa para evitar la utilización de sociedades instrumentales, simulación de deudas o cargas, utilización de cuentas bancarias indistintas, etcétera. Mejorar los medios administrativos del control del fraude.

Fraude en el desempleo. Ajustes en los procesos de gestión en los que participan el Inem y la Seguridad Social. Agravar las responsabilidades del empleador que haya inducido al fraude del empleado. Mayores sanciones para quienes obstruyan la labor de la inspección. Sustituir el PER por nuevos proyectos.

Fraude a la Seguridad Social. Mayor coordinación administrativa. Concienciar a los médicos que dan partes de baja sobre el fraude en la ILT. Dar prioridad en la asistencia sanitaria al trabajador de baja. Intercambiar información entre los centros gestores y la Inspección de Trabajo. Potenciar visitas de inspección en horas de trabajo.