El escándalo en tomo a Jackson destapa la lucha por su imperio
Mientras sigue el escándalo en torno a Michael Jackson y las acusaciones de abuso sexual de menores, abogados y asesores del cantante libran una lucha sin piedad para controlar una situación que amenaza todo un imperio financiero.
Detrás de la polémica causada por la demanda presentada contra Jackson por un niño de 13 años que le acusa de abusos sexuales, el equipo legal encargado de defender al cantante tiene sus propias divisiones, y los desacuerdos ya han llevado a la renuncia de dos de sus miembros. El abogado Bertram Fields, jefe del equipo legal, y el investigador privado Anthony Pellicano presentaron a primeros de mes su dimisión, tras suscitar las críticas de otros asesores del cantante.
Con esas dimisiones, la defensa legal de Jackson, que a los 35 años encabeza un imperio multimillonario, ha quedado en manos de tres influyentes abogados de California: Floward Weitzman, Johnny Cochran y John Branca, encargado del asesoramiento en los negocios, pero, según fuentes del equipo, verdadero cerebro del grupo.
Pese a la existencia de la demanda civil presentada por el niño, el cantante no ha sido inculpado por el momento, y los fiscales de California se han limitado a investigar el caso sin ordenar ningún proceso criminal.
El imperio de Jackson -que incluye desde catálogos de edición musical a compañías de discos y de producción cinematográfica, pasando por lujosas residencias y un contrato de más de sesenta millones de dólares con la casa Sony- podría hundirse si el cantante no consigue superar el escándalo.
Babelia
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