España retira sus últimos 'cascos azules' de Angola tras cinco años de presencia

El Gobierno ha decidido no sustituir a los tres únicos militares españoles que participan todavía en la operación de la ONU para Angola (Unavem II). En consecuencia, cuando el día 19 concluyan su estancia en ese país africano, se pondrá fin a la presencia de cascos azules españoles, que se ha prolongado ininterrumpidamente desde enero de 1989.El recrudecimiento. de los combates y la falta de perspectivas de acuerdo entre el Gobierno de Luanda y la guerrilla de UNITA ha llevado a España a tirar la toalla. La primera misión en la que intervinieron militares españoles se convierte así en la primera que abandonan sin conseguir sus objetivos.

La retirada podría servir de precedente para una decisión similar en Bosnia-Herzegovina, si en marzo, cuando cumple su periodo el actual contingente, el proceso de paz sigue estancado. El ministro de Defensa, Julián García Vargas, inicia hoy, lunes, una visita de tres días a las tropas españolas desplegadas en la antigua Yugoslavia.

España participó con siete oficiales en la primera misión de Naciones Unidas en Angola (Unavem I), que controló la retirada de las tropas cubanas y se prolongó desde enero de 1989 hasta junio de 1991. En esta fe cha se inició la segunda misión de Naciones Unidas en el país (Unavem II), destinada a vigilar la aplicación de los acuerdos de paz firmados en Estoril (Portugal) entre el Gobierno del MPLA (Movimiento Popular de Libera ción de Angola) y la guerrilla de UNITA (Unión Nacional para la Independencia Total de Angola). España contribuyó también a esta segunda operación. Sin embargo, la guerrilla de UNITA no aceptó la victoria del MPLA. en las elecciones de septiembre de 1992, que fueron ganadas limpiamente, según los observadores, y reabrió una guerra que causa actualmente un millar de muertos diarios.

Reducción de observadores

La ONU ha ido reduciendo su presencia en el país africano y de los 350 observadores militares que había en 1991, sólo quedaban 75 el pasado mes de septiembre. Lo mismo ha hecho España, al no sustituir a los oficiales que concluían su misión.

Mientras, el ministro de Defensa, Julián García Vargas, viaja hoy a la antigua Yugoslavia para visitar, por tercera vez desde que llegaron a la zona hace 13 meses, a las tropas españolas.

El ministro visitará la base de Medugorje y el destacamento de Dracevo, próximos a la frontera de Bosnia con Croacia, pero no el de Jablanica, ya que ello le obligaría a cruzar el frente. Si las condiciones meteorológicas y de seguridad lo permiten, se desplazará en helicóptero al cuartel general de la ONU en Kiseljak, a 20 kilómetros de Sarajevo, para reunirse con los jefes máximos de los cascos azules en la antigua Yugoslavia y Bosnia-Herzegovina, los generales Jean Cot y Francis Briquemont, francés y belga, respectivamente.

Mañana, martes, el ministro de Defensa visitará, en el puerto italiano de Trieste, la fragata Victoria y los dos aviones -un P-3 Orion y un Aviocar- que colaboran en el control del embargo internacional a Serbia.