Los sindicatos insisten en que el Gobierno debe dar marcha atrás en su reforma laboral
Los sindicatos ven cada vez más argumentos para convocar huelga general en contestación a las medidas de reforma laboral que el Gobierno aprobó el viernes. Agustín Moreno, secretario de Organización de CC OO, ha sido rotundo al afirmar que "la huelga general es la respuesta qué se impone". Apolinar Rodríguez, secretario de Acción Sindical de UGT, ha dejado un resquicio para evitarla: "Seguimos tendiendo la mano a la negociación hasta final de enero". El Gobierno envió ayer el texto de la reforma al Consejo Económico y Social (CES), que dará su dictamen el día 14.Es a final de enero para cuando las centrales sindicales tienen previsto convocar la huelga general. Según Rodríguez, durante el tiempo que queda "se puede intentar hallar un equilibrio" tras las medidas sobre reforma laboral "ya que suponen mayor indefensión para los trabajadores y mayor facilidad para el despido". Según el dirigente de UGT "el Gobierno debiera aprovechar esa oportunidad que le ofrecemos porque no se puede despilfarrar ese afán de diálogo".
Ante ello, subrayó que "la propuesta de huelga general establece un horizonte de esperanza para los trabajadores, porque medidas como las del viernes, que ni siquiera fueron negociadas y que han significado un fuerte desequilibrio para los trabajadores, necesitan una respuesta".
En esa línea insistió Agustín Moreno, que calificó las medidas de "agresión social". Moreno, que considera las medidas brutales y sin precedentes en Europa, dijo sobre el contrato de aprendizaje: "El contrato basura de aprendizaje condena a un colectivo muy amplio de trabajadores entre la franja de los 16 y los 25 años a ganar 39.000 pesetas al mes sin, derechos sociales como el desempleo". Y añadió que fomentará la sustitución de trabajadores fijos "con cargas familiares por jóvenes ganando sueldos de miseria", informa Europa Press.
Su compañera de sindicato, Salce Elvira, secretaria de Empleo, dijo que la reforma ronda los principios dictatoriales de quienes aprovechan el poder para cargarse el derecho de los trabajadores, "que se encontrarán con los mismos problemas que huvo en los años veinte y tendrán que volver a recuperar sus derechos".
La patronal CEOE ha cuantificado en 276.000 millones de pesetas el impacto de la huelga general en el supuesto de que fuera secundada por todos los trabajadores. De esta cantidad, 127.512 (el 46,2%) correspondería al salario que se dejaría de percibir. Otros 117.576 sería el coste para los empresarios y autónomos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.