Las urnas de la discordia palestina
¿Cuándo un jordano es palestino? ¿Y viceversa? Oficialmente, la facción Al Fatah de Yasir Arafat, la fuerza dominante en la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), no se ha opuesto a que los palestinos de Jordania actuaran políticamente como ciudadanos de este país pese a que, teóricamente, los palestinos que votaron ayer no podrán hacerlo cuando se convoquen elecciones en Gaza y Jericó, dentro del plan de paz firmado entre la OLP e Israel el 13 de septiembre en Washington.Las facciones rivales de Arafat formularon, en cambio, un llamamiento al boicoteo de la consulta jordana. Desde el punto de vista de organizaciones como el Frente Democrático para la Liberación de Palestina (FDLP) y el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), ambas con sus cuarteles generales en Siria, votar en Jordania es abandonar la opción de votar por el destino de su propia tierra.
Yamal Hamud, un jovial mecánico, que es nieto de un terrateniente palestino de Haifa, y que ayer votó como jordano, resume lo que muchos piensan: "Mejor decir aquí qué es lo que pienso políticamente a tener que esperar a que cristalice un proyecto que está en ascuas"
Centros de estudios políticos en Ammán definen esta actitud como la salida más pragmática para un pueblo que va a tener que conformarse con aceptar las reglas de juego de un país con promesas reales de prosperidad.
En Ammán florecen barrios enteros de costosas casonas de piedra. Son la ilustración del dinero palestino llegado del Golfo Pérsico. "Al menos la situación en Jordania es clara", dice un banquero nacido en Nablus, que halló refugio en los Emiratos Árabes Unidos, de donde se vio obligado a salir precipitadamente tras el apoyo brindado por la OLP a Sadam Husein tras la invasión de Kuwait en agosto de 1990. Desde entonces vive en Ammán, su hogar.
"El futuro de Gaza y Cisjordania no está claro", agrega el banquero. "Hay que esperar y ver qué es lo que sucede allí. Lo malo es que los palestinos estamos cansados de esperar. Jordania es un paréntesis más racional".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.