Cochambrosa comedia posmoderna
Rodada en Zoetrope Studios, con vestuario de Soria Coppola y producción de Roman Coppola, el único posible parecido que tiene esta cochambrosa comedia posmoderna rodada con tan poco dinero como gran equipo, con cualquier producto relacionado con el poderoso y genial Francis Ford Coppola reside en sus inicios. En la medida que tiene más de un punto de contacto con la películas producidas y dirigidas por el personal Roger Corman, en las que F. F. Coppola aprendió el oficio cinematográfico después de sus clases en la Universidad de California. Da la impresión de que ha intervenido mínimamente en la producción de esta película para que sus vástagos hicieran sus primeros trabajos cinematográficos de una manera similar a la suya.El principal fallo que tiene Verano del 76, que a pesar de su título castellano nada tiene que ver con las comedias eróticas con adolescentes nacidas a la sombra del gran éxito de Verano del 42 (1971), de Robert Mulligan, es que el debutante Lucas Reiner y su equipo parecen haberse divertido mucho rodándola, pero no consigue transmitir al espectador esa alegría de vivir experimentada durante el rodaje.
The spirit of 76
Director y guionista: Lucas Reiner.Fotografía: Stephen Lighthill. Música: David Nichtern. Estados Unidos, 1990. Intérpretes: David Cassidy, Olivia d'Abo, Leif Garrett, Geoff Hoyle, Jeff McDonald. Estreno en Madrid: Ideal.
Un chirriante tono posmoderno, a medio camino entre el mejor John Waters y el primer Almodóvar, Verano del 76 narra cómo tres habitantes de Estados Unidos del año 2176 parten en una destartalada máquina del tiempo en busca de la perdida Constitución norteamericana, pero se equivocan y en lugar de llegar a 1776 llegan dos siglos después, el 4 de julio del año del bicentenario. De manera que la película se plantea como una sátira de las costumbres norteamericanas de mediados de la década de los sesenta, y está llena de referencias a objetos y cosas tan tradicionales y locales que a veces resulta incomprensible.
Hijo del realizador Carl Reiner, especializado en comedias que pretenden ser más disparatadas de lo que en realidad son, y hermano menor del más interesante director Bob Reiner, el debutante Lucas Reiner intenta seguir la tradición familiar, pero lo hace con mucho peor pie. No tanto porque Verano del 76 sea una curiosa comedia fallida, sino porque está realizada en 1990, y desde entonces no parece haber hecho nada destacable.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.