De Benedetti reitera su voluntad de entregarse a la justicia italiana
Los abogados de Carlo de Benedetti, presidente de Olivetti, contra el que la magistratura romana dictó el sábado orden de busca y captura, reiteraron ayer que su defendido "está ya a disposición" de la justicia y esperan que sea fijada cuanto antes la fecha de interrogatorio, para presentarse en el Palacio de Justicia.El sábado, fuentes del grupo De Benedetti aseguraron que éste regresaría el martes a Roma. En la causa que instruye la magistrada romana Maria Cordova, De Benedetti aparece como implicado en un delito de corrupción, por haber pagado unos 10.000 millones de liras (unos 850 millones de pesetas) en comisiones ilegales, a cambio de contratos, a funcionarios del Ministerio de Comunicaciones.
El propio De Benedetti había informado de tales pagos a la magistratura de Milán el pasado mayo, cuando se presentó espontáneamente a declarar que Giuseppe Parrella, un ex director general de la SIP, la empresa telefónica del Estado italiano-que para entonces ya había sido detenido y estaba confesando-, le había impuesto el pago de las comisiones citadas con la amenaza de que, si no las satisfacía, Olivetti no obtendría ningún contrato en materia de teléfonos. De Benedetti añadió que, efectivamente, cuando decidió no pagar más comisiones, en 1991, los contratos con la SIP cesaron.
Decisión polémica
Los abogados del presidente de Olivetti no quisieron comentar, en cambio, las supuestas críticas que algunos integrantes del grupo de magistrados milaneses que se ocupan de la investigación conocida como Manos Limpias, sobre corrupción ligada a la financiación de los partidos políticos, vertieron supuestamente acerca de la decisión de Maria Cordova de ordenar la detención de De Benedetti. Sobre la base de la misma documentación, que fue luego transferida a Roma por un fallo de la casación al recurso de competencias planteado por los magistrados romanos, la Audiencia de Milán había mantenido en libertad a De Benedetti.
Francesco Saverio Borrelli, jefe de la fiscalía milanesa, aclaró el mismo sábado que él era el único autorizado a hablar en nombre del grupo y que no había hecho nigún comentario sobre la colega de Roma porque no era ésa su costumbre.
Gherardo Colombo, otro de los magistrados de Manos Limpias, explicó, por su parte, que la decisión de no encarcelar a De Benedetti fue adoptada, en su día por mayoría de todos los magistrados del grupo que se ocupa de las investigaciones. "Nosotros hemos seguido siempre esa línea de las decisiones colegiales, pero no sé cómo se procede en Roma", explicó Colombo.
Eugenio Scalfari, director del diario La Repubblica, controlado por De Benedetti, informaba ayer de que el fiscal jefe de Roma, Vittorio Mele, le había asegurado que no tuvo conocimiento previo de la orden de detención dictada por Cordova.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.