Vergüenza
He sentido vergüenza como español cuando una buena amiga dominicana, residente en Nueva York, me ha contado las peripecias y humillaciones que tuvo que pasar junto a dos amigas también dominicanas que vinieron a España a pasar unos días.Ocurrió en el mes de agosto. En el consulado español de Nueva York le habían informado de que siendo residente norteamericana no necesitaba visado. Su sorpresa fue cuando en el lugar fronterizo se lo exigieron. Ella razonó que cada país puede hacer las leyes que desee y hacerlas entrar en vigor cuando parezca bien. Pero ningún funcionario debe tratar a tres súbditas dominicanas "como si fuésemos delincuentes o mendigos". Así me lo contó ella. Ése fue el trato que recibieron de nuestros agentes de frontera. Siento vergüenza. Ellos nos tratan a nosotros de manera muy digna.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.