Volkswagen fuerza a Díaz Alvarez a dimitir como presidente de Seat
La crisis de Seat provocó ayer el primer abandono. El presidente de la que fue emblemática empresa automovilística española del franquismo, Juan Antonio Díaz Álvarez, se vio forzado ayer a dimitir después de ver rechazado por Volkswagen, propietario de Seat, su plan para reconvertir la fábrica de la Zona Franca de Barcelona. La empresa alemana parece decidida al cierre, lo que supondría la pérdida de 8.000 empleos directos y pondría en peligro otros 25.000 indirectos. Volkswagen propondrá para la sustitución del dimitido a Peter Walzer, un ingeniero considerado como hombre-puente hasta la designación definitiva de un nuevo responsable. La gravedad de la crisis ha movilizado a la Administración. El Gobierno y la Generalitat persiguen el apoyo del Estado alemán de Baja Sajonia -primer accionista de Volkswagen- en la salvación de la factoría. Página 41
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