"Aunque no tengamos dinero, nos expresaremos"
"Mi primer proyecto con el Centro Nacional de Teatro Clásico es saber cuál es el presupuesto para el año que viene. Y según el presupuesto me tendré que apañar", dice Marsillach sobre la compañía que dirige, cuyos últimos montajes, La gran sultana, de Cervantes, y Fuenteovejuna, de Lope de Vega, se están representando estos días en La Coruña y Santiago de Compostela."Tenía pensados dos espectáculos y una coproducción. Pero no me pienso suicidar si no podemos hacerlos todos. Si el país está en crisis nos tiene que afectar a todos por igual. Si no podemos hacer dos, haremos uno", añade Marsillach, que habla de crisis económica y psicológica y que quiere dejar muy claro que no le parecería normal que el Ministerio de Cultura fuera el más desprovisto por el Gobierno".
"No estoy echando piedras sobre mi propio tejado", dice con urgencia el escenógrafo. "Por supuesto que creo que la cultura debe estar mucho más ayudada de lo que está; lo que me parece un error es que los artistas nos empeñemos en que los parados sigan nuestra bandera. La cultura es un lujo necesario e imprescindible, pero un lujo", añade Marsillach que durante 16 meses fue director del Instituto Nacional de Artes Escénicas y Música.
"Además, yo creo mucho en la imaginación de la gente en las situaciones críticas; el franquismo lo demostró con claridad. A lo mejor descubrimos que podemos hacer teatro con menos dinero. Este es un país de nuevos ricos, todos nos hemos equivocado, empezando por el Gobierno que nos lo ha hecho creer. La realidad parece que es otra y a lo mejor hay que hacer teatro y cine de otra manera. Nos tendremos que expresar con menos dinero, pero nos expresaremos. El dinero no tiene porque hacernos callar".
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