La oposición considera "gravísimo" el error de cálculo de Hacienda en la campaña del IRPF

El Partido Popular (PP) e Izquierda Unida calificaron ayer de "gravísimo" el fallo en las previsiones de Hacienda para los resultados de la campaña del IRPF de 1992, en la que se ha detectado que las devoluciones superaban lo estimado en 173.000 millones, arrojando un saldo negativo de 90.000 millones frente al positivo de 61.000 inicialmente previsto. En definitiva, la desviación supone una caída de los ingresos de 151.000 millones. IU solicitó ayer la comparecencia del ministro de Economía, Pedro Solbes, ante la Comisión correspondiente del Congreso

"La previsión no fue buena", reconocían ayer en el Ministerio de Hacienda, aunque no acertaban a dar una explicación convincente por el fallo de los cálculos: "La desviación se explica por la mala situación económica experimentada durante el pasado trimestre", manifestó un portavoz del ministerio. "En todo caso, esto agravará el déficit público de este año", admitió este portavoz.El portavoz no precisó en qué medida el Pallo aumentará estos problemas. La desviación del presupuesto alcanzará los dos billones de pesetas (ver EL PAN del 4 de agosto pasado). El vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra, ha admitido una desviación de 1,3 billones de pesetas, a la que se ha de añadir, al menos, 450.000 millones de pesetas en concepto de gastos extraoprdinarios del Inem en los ejercicios de 1991 y 1992, que no se han cargado hasta los Presupuestos de 1993.

Para Izquierda Unida, la "extraordinaria" desviación en los cálculos de Hacienda para la campaña de renta "compromete muy seriamente toda la política presupuestaria del Gobierno y la ejecución de los Presupuestos Generales aprobados por el Congreso", según el coordinador del grupo parlamentario, Ángel García Castillo., "Se trata de un dinero previsto de gastar con el que no se va a poder contar", declaró.

El Partido Popular aprovechó lo que considera "bastante más que un simple error de cálculo" para criticar el conjunto de la política económica. "Cuando el Ejecutivo subió los tipos del IRPF [en julio de 1992] creyó que recaudaría más y se ha encontrado con el efecto contrario", declaró Cristobal Montoro, responsable de asuntos económicos del partido. "El Gobierno sigue enfrascado en el error, ya que ha vuelto a subir hace poco otro impuesto", afirmó refiriéndose a la subida de la gasolina.

El sindicato Comisiones Obreras se mostró más cauto a la hora de enjuiciar el fallo de las previsiones. "Se trata de un resultado provisional. Hacienda no ha efectuado aún la revisión de las declaraciones con derecho a devolución, por lo que los 173.000 millones de más sobre los previstos pueden verse bastante rebajados", declaró Miguel Ángel García, economista del sindicato.

Con todo, García no se extrañó por la magnitud de las cifras: "Sabiendo que más del 77% de la recaudación del IRPF grava las renta del trabajo, la desviación corresponde probablemente al 4% de empleos destruidos en 1992 y que el Gobierno no debió prever".

Propuesta de IU

Por otra parte, el grupo Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya (IU-1C) presentó ayer una proposición de ley para modificar el Impuesto sobre el Patrimonio y aumentar la presión fiscal sobre las grandes fortunas, con el fin de repartir más justamente la carga tributaría, que el grupo considera que descansan en un porcentaje muy alto sobre el IRPF.La medida supone elevar el tipo máximo del impuesto sobre el del 2,5% actual al 5,4% y rebajar la base imponible de los 1.600 millones actuales a 1.000 millones. La proposición recoge además una mayor segmentación de los tramos de la base liquidable, según la cual desde los 400 millones de pesetas el tipo sería superior al 2,7%.

IU aseguró que, si se adoptara la propuesta, se recaudaría por Impuestos sobre el Patrimonio entre 100.000 y 150.000 millones de pesetas más que hasta ahora, con lo que el ingreso por este concepto subiría hasta unos 200.000 millones, frente a los 74.000 recaudados en 1991 y los 84.000 millones de 1992.