Los frentes bélicos en Bosnia central obligan a suspender la entrega de ayuda humanitaria
A. ARMADA ENVIADO ESPECIAL, La capital bosnia, Sarajevo, vive sus días más amargos: a los bombardeos indiscriminados de los radicales serbios se suman unas críticas condiciones de vida. Mientras tanto, el centro de Bosnia es un mosaico de fuego, con frentes que brotan por doquier, someten a la población civil a la limpieza étnica y a la muerte y bloquean la distribución de ayuda humanitaria. En el terreno político, la presidencia bosnia se reunió ayer, en medio de divisiones, para abordar negociaciones de paz con serbios y croatas. El mediador de la CE, David Owen, señaló que la situación es infernal y va a empeorar.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) decidió ayer suspender durante tres días la salida de convoyes hacia el centro de la ex república yugoslava como protesta contra los actos de chantaje y piratería que hacen casi imposible su tarea de llevar alimentos a cerca de dos millones de personas.Un convoy de ayuda humanitaria procedente de Belgrado lleva más de una semana bloqueado a las puertas de Sarajevo. Las autoridades de ACNUR se han negado a aceptar el chantaje que supone que sus convoyes paguen una suerte de arbitrario peaje por atravesar los controles serbios. Al mismo tiempo, una delegación del Gobierno de Zagreb acordó ayer en el puerto dálmata de Makarska con los croatias y los musulmanes de Bosnia dejar libre paso a los convoyes de ayuda humanitaria. Sin embargo, el acuerdo no pudo impedir que los responsables de ACNUR, cansadas de sufrir continuos robos y extorsiones, decidieran ayer suspender durante tres días el envío de convoyes al centro de Bosnia.
De las delegaciones de ACNUR en Zenica y Tuzla dependen un total de 800.000 refugiados, a los que hay que añadir una población de más de un millón de habitantes a los que la guerra ha reducido a la miseria y sólo cuentan con la ayuda internacional para poder sobrevivir.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció el sábado que enviará centenares de miles de dosis de cloro a Sarajevo para purificar el agua potable y evitar que los primeros casos de tifus registrados degeneren en una epidemia. Es una más de las plagas a, las que deben hacer frente unos ciudadanos que, privados de agua y de luz eléctrica, han dejado de confiar en que la conciencia del mundo imponga una paz que impida que los cañones y los francotiradores serbios (que causan una media de 300 víctimas al mes) sigan castigando a la capital bosnia.
Las grandes matanzas de musulmanes a manos de sus aliados del Consejo de Defensa Croata (HVO) en el centro y el sur de Bosnia han terminado por incendiar el corazón de la antigua república yugoslava, convirtiendo el tránsito por sus carreteras en un suicidio.
Rutas impracticables
Los combates han vuelto impracticable la ruta del Neretva, que pasa por Mostar y Jablanica y llevaba con rapidez ayuda humanitaria hasta Sarajevo, Tuzla y Zenica. Ahora, los cascos azules españoles, canadienses y británicos custodian la ruta.
Pero es una ruta tan peligrosa como endemoniada. La ruptura de la alianza entre croatas y musulmanes ha forjado extraños compañeros de cama. Serbios y croatas combaten juntos al norte, en los enclaves musulmanes de Zepce y Maglaj. Al sur, sin embargo, los croatas combaten solos. Los convoyes humanitarios se ven obligados así a atravesar una infinidad de pueblos y ciudades bajo distintas banderas, lo que crea bolsas de población atemorizadas, tierras de nadie que hacen inviable el tráfico.
A pesar de ello, ocho miembros de la presidencia colectiva bosnia se reunieron ayer en Zagreb, tras su encuentro con los negociadores internaciones Owen y Thorvald Stoltenberg (por las Naciones Unidas), para volver a hablar de la propuesta de serbios y croatas de dividir Bosnia en tres Estados étnicamente diferenciados. La presidencia anunció ayer un nuevo proyecto para Bosnia sobre la base de un Estado federal.
El general francés Philippe Morillon criticó ayer el intento de serbios y croatas de dividir Bosnia y advirtió que ese proyecto puede convertir el país en una suerte de Gaza, territorio árabe ocupado por Israel, con una permanente inestabilidad. Morillon ha abandonado recientemente la jefatura de las fuerzas de la ONU en Bosnia.
Por otra parte, la esposa del anterior jefe militar musulmán de Bosnia, Sefer Halilovic, y un pariente han sido asesinados en Sarajevo, según indicaron ayer fuentes gubernamentales. La mujer de Halilovic estaba embarazada de cinco meses y las fuentes apuntan a una venganza.
La desaparición de un legionario, atribuida a "rapto o deserción"
Los mandos de la Agrupación Táctica Canarias con base en la ciudad bosnia de MedJugorje seguían ayer sin noticias del legionario José Gómez Chinea, de 20 años, que desapareció el sábado. El jefe del Estado Mayor de la Defensa, el general José Rodrigo, aseguró ayer, durante una visita a Extremadura, que la desaparición del casco azul español podría deberse "a una deserción o un secuestro", según informa Jeremías Clemente. Si bien el Ejército sigue pensando por ahora que se trata de una desaparición "voluntaria", al no tener suficientes datos que avalen otra tesis, "tampoco hay que descartar la idea de que le hayan raptado. Aquello es una zona de locos y puede pasar cualquier cosa", dijo Rodrigo.El secuestro del legionario, perteneciente el tercio Juan de Austria III de la Legión, con sede permanente en Fuerteventura, era el supuesto que, en principio, menos credibilidad tenía, a juicio de las fuentes consultadas ayer en la base de Medjugorje, ya que en el puesto de guardia del militar fueron encontrados, perfectamente colocados, el casco y su chaleco antifragmentación.
Los mandos de la Agrupación Canarias se inclinaban a pensar que se trata de una deserción, aunque ignoraban las causas. Una posibilidad que no se descartaba ayer es que Gómez Chinea, natural de La Gomera, que desapareció con su arma reglamentaria y munición, pudiera haber decidido sumarse a uno de los dos bandos en conflicto en la zona, musulmanes o croatas.
La desaparición del legionario ha sido puesta en conocimiento de la policía local, policía de fronteras y oficina de seguridad del Consejo de Defensa Croata (HVO), pero hasta el momento nada seguro se sabe de su paradero.
El caso del legionario Gómez Chinea es el primero de estas características que se plantea entre las tropas españolas en Bosnia desde su llegada en el otoño pasado.
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