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Cristiani jubila a los generales responsables de la muerte de los jesuitas en El Salvador

La gente se echó a la calle la noche del miércoles en San Salvador para festejar en algarabía la caída de la promoción militar de La tandona, que ayer fue pasada a retiro por el presidente Alfredo Cristiani. Con la salida del Ejército de esta siniestra promoción de militares, responsable de numerosos desafueros, deja el mando el hasta ahora ministro de Defensa, general René Emilio Ponce, el autor intelectual del asesinato de los jesuitas y uno de los poderes fácticos que más obstaculizaron el proceso de paz de El Salvador.

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La plaza Cívica de San Salvador, otrora escenario de grandes manifestaciones contra el poderío del Ejército en este país, se llenó de mariachis, bandas de música y gentes de todas las edades en una fiesta común: por fin criminales de la talla de Ponce, su viceministro Juan Orlando Zepeda y el jefe del Estado Mayor del Ejército, Gilberto Rubio, se marchaban a casa. Todos ellos habían sido señalados por la Comisión de la Verdad de la ONU como responsables no sólo del asesinato de los jesuitas sino también de execrables crímenes cometidos contra la población civil durante la guerra.Cristiani, impulsor de la amnistía que hoy impide que estos militares se sienten en el banquillo, daba así cumplida respuesta a la Comisión de la Verdad, pese a que desde que se le exigió la salida de estos jefes del Ejéricito han pasado ya casi tres meses. Ponce, que presentó la dimisión el pasado 12 de marzo, rectificó luego y se mantuvo al frente del Ministerio de Defensa.

La tandona cae por vieja y desprestigiada, y no por decisión enérgica de Cristiani, a quien sin embargo ayer se le acababa el plazo dado por la ONU para satisfacer la depuración militar que le exigen los acuerdos de paz. Con excepciones honrosas como la del general Mauricio Ernesto Vargas, el militar que negoció la paz con el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y responsable hasta ayer de la subjefatura del Estado Mayor, en su mayoría han sido hombres parapetados al poder. Pese a que, por edad, debían haberse retirado hace algún tiempo, permanecieron en sus puestos sin ningún tipo de pudor. De ahí que quienes les sustituyan ahora sean militares de dos promociones posteriores. Las de en medio van también a retiro forzoso.

Ponce se hace político

Ponce ha anunciado que se integrará en la política, posiblemente en el también siniestro Partido de Conciliación Nacional (PCN), una fuerza minoritaria que, con anterioridad a la fundación de Arena por el mayor Roberto D'Abuisson, fue el partido tras el quese escondía el Ejército. Zepeda y Rubio manifestaron su intención de alejarse de cualquier actividad Política y Vargas, el gran sacrificado en esta operación en bloque, se convertirá en un profesor universitario.Esta depuración satisface los acuerdos de paz entre el Gobierno y el FMILN, que ayer no disimulaba su alegría puesto que con el pase a retiro de estos militares se pone fin a la impunidad. La salida de La tandona, cuyos componentes han estado en activo durante 30 años, pone fuera de juego en El Salvador a todo un aparato que ha sido director de la estrategia militar y represiva contra el FMLN.

Washington, que suspendió una ayuda militar de 11 millones de dólares hasta que no fueran depurados Ponce y los otros jefes del Ejército acusado por la Comisión de la Verdad, anunció ayer que esta partida. será desembolsada en las próximas semanas. La depuración militar de El Salvador que ahora concluye ha afectado a un total de 103 jefes y oficiales.

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