_
_
_
_

YeItsin reduce los poderes de Rutskoi y le arrebata la lucha anticorrupción

Pilar Bonet

El presidente de la Federación Rusa, Borís Yeltsin, se hará cargo directamente de las investigaciones sobre la corrupción en Rusia que hasta ahora eran competencia del vicepresidente, Alexandr Rutskói. La decisión presidencial es una escaramuza más de las que libran ambos políticos, cada vez más enfrentados. Rutskói reiteró ayer sus acusaciones sobre corrupción en medios próximos a la presidencia que ya lanzara a mediados de mes después de que Yeltsin anunciara que le recortaba derechos y responsabilidades, entre ellas las relativas a la reforma de la agricultura rusa.

La agencia de noticias Itar-Tass informó ayer que Yeltsin acababa de filmar un decreto que pone la lucha contra la corrupción directamente bajo su competencia. El presidente ha ignorado el consejo de algunos demócratas, entre ellos el ex alcalde de Moscú, Gavril. Popov, de que encargara a la Fiscalía del Estado la investigación de los cargos formulados por Rutskói, quien dice contar con 11 maletas de documentos que prueban las actividades ilegales (te varios estrechos colaboradores del presidente, todos ellos reconocidos reformadores.El vicepresidente, que expuso sus primeras acusaciones en plena campaña por el referéndum, apoyó ayer ante el Sóviet Supremo la creación de una comisión especial con amplios poderes para investigar la corrupción. El Parlamento aprobó y tomó a su cargo la creación de este organismo, compuesto por seis fiscales.

Rutskói, que había prometido dar a conocer en detalle los documentos supuestamente comprometedores en su poder, no aspiró ayer a obtener la publicidad televisiva que había deseado el domingo para su intervención en el Parlamento. El vicepresidente hizo hincapié en las exportaciones ilegales de materias primas desde la provincia de SverdIovsk, donde Yeltsin fue secretario del Partido Comunista entre 1977 y 1985, e implicó en ellas a Gennadi Búrbulis, un estrecho colaborador del presidente. Rutskói anunció que se habían exportado en un año desde SverdIovsk materiales estratégicos y metales raros por valor de 3.000 millones de dólares (más de 345.000 millones de pesetas).

Las acusaciones de Rutskói han sido desmentidas por el entorno presidencial, con excepción del asunto del mercurio rojo, nombre con el que se designa un supuesto contrabando de material estratégico. El jefe de la Administración de SverdIovsk, Eduard Rossel, es un antiguo colega de Yeltsin, y las peticiones de sectores demócratas, preocupados por la arbitrariedad en la concesión de licencias de exportación en la zona, han sido sistemáticamente desoídas.

El ex Inspector Jefe del Estado, Yuri Bóldirev, fue destituido cuando se disponía a investigar la corrupción en el antiguo feudo de Yeltsin y el vicepresidente urgió a la comisión creada ayer a iniciar el trabajo inmediatamente, dado que, según dijo, se está procediendo a la destrucción de documentos que prueban la corrupción existente.

Privatización

El Parlamento de la Federación Rusa desafió ayer abiertamente los resultados del referéndum del pasado domingo y consideró "insatisfactorio" el trabajo realizado por el Gobierno en el marco del programa de privatización en 1992. Este programa es uno de los pilares básicos de la política económica del presidente y obtuvo el apoyo del 52,8% de los ciudadanos que acudieron a las urnas el día 25. El viceprimer ministro, Anatoli Chubáis, presidente del Comité de la Propiedad Estatal, señaló ayer que el Parlamento había "roto definitivamente" con la sociedad y que los diputados tan sólo "se representan a sí mismos".

Yeltsin, además, prohibió ayer la celebración de marchas y concentraciones en la Plaza Roja de Moscú con motivo del 1 de Mayo, prohibición que también extendió a las inmediaciones de los edificios oficiales. Los sindicatos tenían previsto celebrar la tradicional marcha a través de la Plaza Roja, que se ha convertido en un lugar crecientemente usado por los enemigos del presidente para manifestar su desacuerdo con Yeltsin.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_