Miguel Narros y Aitana Sánchez-Gijón montan "A puerta cerrada", de Sartre
La obra se presenta a partir del jueves en el teatro Bellas Artes de Madrid
A puerta cerrada, de Jean-Paul Sartre, obra singular del existencialismo, llega con aires de recuperación simbólica a los escenarios madrileños a cargo de significativos nombres del teatro español: Alfonso Sastre (versión); Miguel Narros (dirección); Aitana Sánchez-Gijón (empresaria y actriz); Mercedes Sampietro y Carmelo Gómez (intérpretes) y Andrea d'Odorico (escenografía). Todos con suficiente peso como para crear expectativas sobre este montaje, que se estrena el jueves en el teatro de Bellas Artes y con el que sus promotores quieren discutir sobre la vacuidad de la última década e invitar a la reflexión.
Madrid presenta esta semana dos espectáculos poco habituales: Strindberg (mañana se estrena en el teatro María Guerrero La señorita Julia) y Sartre, dos pensadores contemporáneos que parecen unirse como alternativa al abuso del escaparatismo teatral.Tanto Narros como Aitana Sánchez-Gijón querrían colaborar con este espectáculo a poner freno a lo que ellos consideran una huida hacia adelante de gran parte de la sociedad española. Para ello vuelven la mirada hacia atrás, y Narros recurre para la puesta en escena a gente joven: "Son sabia nueva y es importante estar con ellos", dice el director.
"La idea partió de Miguel", cuenta la actriz, miembro de Strión, una de las poquísimas productoras teatrales privadas de España, formada por jóvenes profesionales. Ella sólo sabía de Sartre por sus estudios de bachillerato: "Cuando leí la obra me quedé muy impactada, hasta el punto de que me sentí como mareada; tenía una excitación enorme tras leer mi personaje. El texto me dejó paralizada. A puerta cerrada es, de toda la producción teatral de Sartre, la más ilustradora de sus tesis existencialistas".
La trayectoria profesional de Aitana Sánchez Gijón empezó en la adolescencia con el grupo teatral La Barraca, de Aranjuez. Cuando ya estaba más que decidida su profesión, trabajó en programas juveniles de televisión, en diferentes series para la pequeña pantalla y también en películas -que siempre alternaba con montajes teatrales-, entre las que destaca Bajarse al moro. Próximamente se estrenarán sus dos últimas películas, Habanera, de Ton¡ Verdaguer, y El pájaro de la felicidad, de Pilar Miró, en la que también trabajó con Mercedes Sampietro.
Interpelación
Alfonso Sastre, autor de la versión, dice del texto: "El porqué de subir este texto al escenario no es otro que porque su testamento nos interpela continuamente". A Miguel Narros esta obra le rondaba desde hace años. Piensa que es un momento muy adecuado para representar al padre del existencialismo: "Sobre todo porque al venirse abajo toda una serie de ideales y sistemas, que han muerto, se produce una necesidad de reflexionar, de pararse... Habíamos cogido tal velocidad que entiendo que esta invitación sartriana a la autocrítica se pueda ver como un frenazo gordo".Narros, consciente de que se vive en una sociedad ampulosa con un teatro exhibicionista, en el que se podría afirmar que él mismo ha caído en más de una ocasión, quiere utilizar este montaje como compensación: "¿No nos faltan otras muchas cosas?".
De la obra surgió una frase emblemática en la década de los sesenta: "El infierno está en los otros". Y es que A puerta cerrada relata cómo los personajes llegan a la antesala del infierno, y la condena que les cae es permanecer juntos durante toda la eternidad. Se presentan como personas intachables, que a lo largo de la obra se irán desnudando, mostrando su verdadera personalidad: la de unos sujetos atormentados, crueles y suicidas.
Babelia
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