El Tribunal de Cuentas remitió una contabilidad incompleta

Los peritos de Hacienda no han podido "verificar fehacientemente" las relaciones económicas entre el PSOE y las empresas Filesa y Time Export, a través de proveedores comunes de ambos, debido a que el Tribunal de Cuentas no ha remitido al juez instructor la contabilidad completa del PSOE en el periodo 1987-91, según señalan al explicar las limitaciones a la hora de realizar su trabajo.

Esa documentación que faltaba tampoco fue recogida en las tres actuaciones de entrada y registro en la sede socialista de la calle Ferraz. Los peritos no explican a qué fue debido esto, aunque es seguro que se refieren a que la comisión judicial no pudo registrar las dependencias de Guillermo Galeote, en las cuales se encontraba la documentación buscada, según dijeron los dirigentes socialistas Txiki Benegas y Francisco Fernández Marugán a la citada comisión judicial. Galeote tiene fuero, en su calidad de diputado, y no le afectaba la orden de registro dada por Barbero, puesto que no existe suplicatorio concedido contra él.

Tampoco han sido investigadas las cuentas corrientes de Carlos Navarro y Josep Maria Sala, ni se ha indagado en su realidad patrimonial, como señalan los peritos expresamente en su informe.

Teniendo en cuenta estas limitaciones y otras derivadas de la falta de tiempo, los inspectores de Hacienda han llevado a cabo un análisis de las relaciones de Filesa, Malesa y Time Export con sus clientes y proveedores. También han verificado los documentos soporte de los movimientos financieros, y han analizado la trascendencia tributaria inmediata de los hechos comprobados documentalmente.

Sin personal técnico

Los peritos destacan que Filesa y Time Export no contaban con personal técnico en relación "a la naturaleza y pretendido contenido de los informes facturados", ni existe subcontratación de los mismos. "Los proveedores relevantes de ambas empresas son del sector de la publicidad (Producciones Dobbs, El Viso Publicidad y Mabuse), de artes gráficas (Hauser y Menet) o simplemente sin actividad conocida (Tecnología Informática 2020). En suma, se trata de empresas cuya actividad nada tiene que ver con el contenido de los informes supuestamente entregados a estos clientes".También señalan los peritos que las empresas que encargaban esos supuestos informes disponen de sus propios servicios de estudio y departamentos técnicos "que constituyen, precisamente, la razón de ser de su existencia". Los peritos dedican la parte más detallada de su trabajo al cálculo de las cuotas tributarias no ingresadas.