El galeón de 'Piratas' crea polémica en Marsella
Un chiste popular dice que la embocadura del puerto viejo de Marsella es tan pequeña que, una vez, una sardina la tapó. En este caso, los comentarios no los ha levantado una sardina, sino una enorme embarcación. El Neptuno, réplica de un espectacular galeón español, construido para el rodaje de la película Piratas, de Roman Polanski, ha suscitado una polémica ciudadana. Las autoridades municipales desean retirar el barco, tras las quejas de los vecinos, irritados porque la vista sobre el mar es tapada por los mástiles, mientras que los dueños del barco, la companía cinematográfica Cathargo, desearían que el galeón se convirtiera en un museo permanente.
Los vecinos desean ver amarrado el barco de Piratas en la isla más próxima a Marsella, Frioul, pero, de momento, el Neptuno aparece como fantasmagórica y operística prolongación de La Canevière, el popular paseo de la ciudad portuaria francesa.
El barco fue construido para el rodaje de la superproducción franco-tunecina de 1986 dirigida por Polanski, y tiene 68 metros de eslora, tres mástiles, 4.500 metros cuadrados de vela y tres puentes, con camarotes perfectamente acabados. El Neptuno costó entonces unos 800 millones de pesetas, más de una cuarta parte del total de aquel proyecto, que no fue un gran éxito y que interpretaron Walter Matthau, Cris Campion y Charlotte Lewis.
Parte de la última película de Polanski también transcurre en un barco, un transatlántico. El director, de 59 años, rodó Lunas de hiel con su mujer, la actriz Emmanuelle Seigner, de 27.
Babelia
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