"La ciencia va por delante en medio ambiente"
Tomás Azcárate es ecólogo y tiene tras de sí una larga labor de gestión de espacios naturales, de 1982 a 1991, al frente de la Agencia de Medio Ambiente de Andalucía (AMA). Antes, en 1979, fue el primer biólogo que entró en el Instituto para la Conservación de la Naturaleza (Icona). Desde 1987 ha sido también el presidente del comité español del programa Man and Blosphere (MaB), impulsando la creación de reservas españolas de la biosfera, como la de la cuenca alta del Manzanares. Las últimas, en trámite, son las islas de Menorca y Lanzarote. Ahora ha sido elegido presidente del consejo internacional que dirige el programa.Pregunta. ¿Cómo funciona el MaB?
Respuesta. Es el único pro grama que se estructura mediante comités nacionales. Sus presidentes representan a los países respectivos, y el órgano ejecutivo es el buró, que se ha elegido ahora, con un presidente, que soy yo, y cinco vicepresidentes. El hecho de que se haya elegido a un español creo que supone también un refuerzo político para el papel de España en la Unesco, y, por tanto, en la ONU. La Unesco está en alza; está mal económicamente, pero hay gran interés Político.
P. ¿Qué importancia tiene el MaB?
R. Creo que es el programa medioambiental más importante del mundo, porque tiene una base científica. Está claro que los científicos son los que entienden, los que tienen que ir por delante en la protección.
P. ¿Cómo funciona?
R. Hay tres tipos de acciones: la investigación, las reservas de la biosfera y la divulgación de la importancia de los ecosistemas, especialmente en países en vías de desarrollo.
P. ¿Cómo se declara una reserva de la biosfera?
R. Es un proceso largo. Se hace siempre a propuesta de los Gobiernos, y se exige un nivel de protección, un responsable, un proyecto. Alrededor del núcleo central, que se intenta proteger a tope, se inician acciones de desarrollo sostenible y se es tudia su repercusión sobre el ecosistema total. Hay 320 en el mundo, y una de las últimas, de las mayores, es la reserva de Casiquiare, en Venezuela, que comprende el territorio de los yanomami. El MaB proporciona el paraguas, la denominación de origen.
P. ¿Qué opina sobre la sensibilización mundial ante el medio ambiente?
R. Soy escéptico respecto a Río y temas como el tratado de la biodiversidad. Hay muchos tratados ya y no se cumplen. Creo que se impondrá el pragmatismo y serán el Banco Mundial, los científicos y los propios países, a través de los proyectos bilaterales de cooperación, los que funcionarán al final. El medio ambiente se está incorporando a la economía, y hay que ayudar a la economía a solucionar los problemas medioambientales. Hemos visto cómo los científicos han tomado la iniciativa, avisando, por ejemplo, del agujero de ozono, y cómo esto ha sido recogido por los medios de comunicación antes que por los políticos.
P. ¿Qué papel debe desempeñar el MaB?
R. Ahora es una época de transición. Con la cumbre de Río ha terminado un periodo y empieza otro. Es necesario pasar a aplicar las fórmulas de desarrollo sostenible a mayor escala, en el Amazonas, la tundra. El MaB deberá analizar, valorar, orientar. Hemos decidido entrar de lleno en el tema de la biodiversidad, estudiamos la presencia del programa en los temas climáticos, queremos consolidar la red de reservas de la biosfera mediante un tratado internacional con rango legal e ir hacia unidades regionales de desarrollo sostenible.
P. ¿Qué ha hecho España en el MaB?
R. Somos el único país que forma parte de dos regiones, la europea (Euromab) y la iberoamericana (Iberomab). Gracias a eso, hacemos de puente entre Europa y Latinoamérica. El comité español tiene muchas actividades dentro del país y también proyectos de cooperación ambiciosos como el que llevamos actualmente con el Congo, para el estudio de los gorilas de montaña, uno en el Pantanal boliviano y otro en la República Dominicana.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.