Un avión alemán de la ONU, alcanzado por fuego antiaéreo, en Croacia
Un avión alemán cargado con ayuda humanitaria para los habitantes de Sarajevo resultó alcanzado ayer por disparos de una batería antiaérea, cuando sobrevolaba la localidad de Karlovac, en el suroeste de Croacia. El aparato regresó inmediatamente a Zagreb donde aterrizo sin problemas. Uno de sus tripulantes resultó herido, según informó un portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que no especificó la gravedad de las heridas.Por otra parte, las autoridades serbias impidieron el paso de un convoy de ACNUR hacia el este de Bosnia, declaró ayer el portavoz del ACNUR en Zagreb, Peter Kessler. El convoy debía llevar ayuda humanitaria a la región de Zvornik, fronteriza entre Serbia y Bosnia.
El este de Bosnia ha sido asignado a la comunidad musulmana según el plan de paz que preparan los mediadores internacionales, Cyrus Vance y David Owen. Aunque Radovan Karadzic, líder de los serbios de Bosnia, ha aceptado en principio este plan, sus hombres tratan de expulsar a los musulmanes de la zona para forzar la propuesta de su jefe de realizar un referéndum en el área y lograr, con un temprano asentamiento de serbios, que pase a su control.
El presidente de Bosnia, Alia Izetbegovic, declaró ayer que el plan de paz de los mediadores no supondrá el fin de la guerra en su país, ya que, estimó, hace "demasiadas concesiones" a los serbios. Las autoridades de la autoproclamada República Serbia de Krajina, por el contrario, consideran que los mediadores deben exigir a Croacia que se repliegue a las posiciones anteriores al 22 de enero.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.