El grupo Jazzpaña se presenta con éxito en el MIDEM de Cannes

La actuación de Jazzpaña en el Mercado Internacional del Disco y de la Edición Musical (MIDEM) de Cannes marcó uno de los puntos de mayor rigor musical del certamen. Más que un grupo Jazzpaña es un proyecto, una idea impulsada desde Alemania para conseguir una cooperación multicultural de músicos internacionales que, bebiendo en el flamenco, lo fusionan con el jazz, con unos resultados de gran nivel artístico pero de difícil continuidad.

,Con Jazzpaña se puede repetir el drama que abate buen número de los proyectos musicales españoles, generalmente los de mayor envergadura: que su presentación sea al mismo tiempo su despedida. Jazzpaña -palabra que los alemanes impulsores de la idea tienen el detalle de escribir con eñe-actuó en el MIDEM de Cannes para presentarse internacionalmente y, por el momento, todos de vuelta a casa. Veinte músicos a Alemania, el arreglista y director a California, un guitarrista a París y siete a España. ¿Cuándo volverán a tocar juntos? ¿Lo harán alguna vez más? Nadie responde y es una lástima porque la idea merece la pena.En 1988, el alemán Siegfred Loch abandonó su brillante carrera y su cargo de presidente de la Warner en Europa para independizarse y crear ACT, una pequeña discográfica que comenzó reeditando una grabación flamenca de 1965 con La Singla y Juan Maya. Continuó con una fantasía de flamenco y jazz en la que estaban Miles Davis, Al di Meola y Chick Corea, entre otros. Ahora lanza Jazzpaña. "El negocio de la música ha llevado a una cerrazón de estilos", dice, "y éste es un proyecto que demuestra que la cooperación entre diferentes músicas y culturas tiene futuro y es lo que interesa al mundo".

En junio de 1992, músicos españoles -Jorge Pardo, Carles Benavent, Ramón El Portugués, Juan Manuel Cañizares y Joselín Vargas-, norteamericanos -Michael Brecker, Al Dimeola, Peter Erskine, Steve Khan...- y la orquesta alemana de la WDR, con la dirección de arreglos de Vince Mendoza y Arif Mardin, grabaron en Colonia el disco que el pasado martes se presentó en el MIDEM y que, por cierto, nadie se decide a publicar en España.

El concierto, con el auditorio del Noga Hilton a rebosar, comenzó con la guitarra de Juan Manuel Cañizares para continuar con unas siguiriyas de Ramón El Portugués. Después llegó El Vito por bulerías, que introdujo a la gran orquesta de Peter Erskine. Vince Mendoza demostró sus excelentes cualidades como arreglista y compositor en una pieza orquestal que dio paso a una no muy afortunada versión del Soy gitano de Camarón de la Isla, a quien está dedicado el disco de Jazzpaña. El concierto acabó entre ovaciones de un público interesado y selecto.