El Vaticano critica a Clinton por liberalizar el derecho al aborto

Las medidas adoptadas el viernes por el presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, para liberalizar el derecho al aborto recibieron el sábado fuertes críticas del Vaticano, desde las páginas del diario L'Osservatore Romano.

"Aquellos que creían que las primeras actuaciones de Clinton iban destinadas a una renovación relacionada básicamente con la protección de los derechos humanos se han llevado un gran desengaño", señala el periódico. "Con estas medidas, la anunciada renovación abre el camino hacia la muerte y la violencia contra los seres inocentes". "Esto no representa ningún progreso para Estados Unidos ni para la humanidad, que, una vez más, se ve forzada a aceptar la humillante derrota de la vida", añade.

Nada más asumir la presidencia, Bill Clinton decidió poner en marcha medidas relacionadas con la protección del derecho al aborto y de los derechos de los homosexuales para contrarrestar la acusación de romper promesas electorales, lanzada después de que Clinton rectificara su posición sobre los refugiados haitianos para mantener la prohibición del asilo por causas económicas. El pasado viernes firmó cuatro documentos que levantan otras tantas restricciones al derecho al aborto, vigentes durante los últimos Gobiernos republicanos.

La decisión de Clinton supone que las clínicas de planificación familiar puedan ser financiadas con fondos públicos, que los sanatorios financiados por fondos federales podrán aconsejar a sus pacientes en la materia y que los hospitales militares podrán practicar interrupciones del embarazo. Además, Clinton también ha ordenado revisar la prohibición de la píldora abortiva francesa RU-486 y ha autorizado el uso de tejidos fetales para fines científicos, ambas cosas prohibidas por Bush.

Pero las respuestas conservadoras no se han hecho esperar y, el mismo viernes por la tarde, decenas de miles de antiabortistas se manifestaron ante la Casa Blanca para recordar el vigésimo aniversario del dictamen del Tribunal Supremo de Estados Unidos que legalizó el aborto.