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ARTE

El simulacro y sus estrategias

Recientemente, con ocasión del Mois de la Photo de París, la exposición La primera fotografía reunió lo que unos 90 fotógrafos consideraban como la toma que sirvió de punto de arranque de su producción ulterior; en ella, Joan Fontcuberta (Barcelona, 1955) presentaba un fotomontaje titulado ¿Por qué no lo dices? (1973). Imagen de estética surrealista, cuyo argumento era una oreja incrustada en una pared arañada por una hilera de manchas. Posiblemente sería la primera construcción de un ser imposible argumento recurrente en buena parte de su obra-inicio, consciente o inconscientemente, de las trayectorias más coherentes y sólidas de la fotografía contemporánea española.La colección Història artificial. El cos i les tenebres, de Fontcuberta, estructurada en seis apartados:. Herbarium, Fauna, Safari, Frottogrames, Palimpseptos y Doble cos, es una síntesis de sus trabajos realizados durante 20 años. En conjunto evidencia la importancia de lo que Rosalind Krauss denominó como la previsualización como rasgo definitorio de una suerte de práctica fotográfica tangencial a otras áreas plásticas. Aquí todo es hermosamente inventado, desde el uso alternativo que el autor hace del medio a las historias que relata en estos seis capítulos. El acto fotográfico en sí. mismo no es sino un elemento más de ese juego, con estatuto similar al del taxidermista que fabrica un determinado animal híbrido diseñado por Fontcuberta -en colaboración con Pere Formiguera para el apartado-Fauna-, o de la búsqueda de documentos que serán posteriormente refotografiados. El fotógrafo construye animales recicla plantas, registra papeles pintados de polivinilo (Palimseptos), o recurre a las imágenes de los folletos de agencia de viajes en la más pura estética Félix Rodríguez de la Fuente (Safari) recreando un discurso completa menta nuevo.

Historia artificial

El cor i les tenebresFotografías de Joan Fontcuberta. IVAM. Centro Julio González. Valencia Hasta el 24 de enero.

Cabe subrayar el papel que juega la instalación de las fotografilas animales disecados, sonidos, mesas, retroiluminaciones... en un contexto donde lo fotográfico se diluye en un discurso más complejo. No cabe la menor duda que forman parte de esa gran familia que Christian Caujolle denominó como lo fotográfico donde tiene cabida cualquier realidad, o ficción, captada por la cámara con tal que sea reproducible sobre un soporte de dicha naturaleza.

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