El Senado francés exculpa a Fabius por el caso de la sangre infectada con sida

El ex primer ministro francés socialista, Laurent Fabius, no tendrá que comparecer ante el Alto Tribunal de Justicia por el escándalo de las transfusiones de sangre contaminada con el virus del sida. Embargados por una fuerte duda sobre su responsabilidad en este asunto, los senadores centristas han conseguido evitarle este amargo trago. No obstante, comparecerán ante el Alto Tribunal otros dos ex ministros socialistas: Georgina Dufoix y Edmond Hervé, responsables de la sanidad pública francesa a mediados de los años ochenta.Fabius ha sudado tinta durante varias semanas. La oposición de centro y de derecha, mayoritaria en el Senado francés, había iniciado el procedimiento para que compareciera ante el Alto Tribunal como presunto autor del delito de homicidio involuntario.

Pero el pasado miércoles los senadores centristas cambiaron de opinión y propusieron excluir a Fabius de las acusaciones contra los ex ministros socialistas presuntamente implicados en la contaminación de millares de hemofílicos. La propuesta fue mal acogida por sus aliados gaullistas de la Asamblea para la República (RPR).

Dufoix, ex ministra de Sanidad, y Hervé, que fue su secretario de Estado, siguen acusados por el Senado francés. Sin embargo, queda un largo camino antes de que comparezcan ante el Alto Tribunal, el único organismo que según la Constitución francesa puede juzgar a ministros y ex ministros por presuntos delitos cometidos en el ejercicio de sus funciones. La Asamblea Nacional tendrá que aprobar la resolución acusatoria adoptada por el Senado y sólo entonces un grupo de magistrados podrá comenzar el trabajo de instrucción.